Si nos trasladamos al mercado norteamericano en la década de los 80 en búsqueda de algún automóvil con cierto aire deportivo y un rendimiento elevado, es muy poco probable que alguien se acuerde del Dodge Omni. Se trataba de un vehículo compacto de tracción delantera que contaba con una carrocería de cinco puertas y nada que pueda interesar a un amante del mundo del motor. Sin embargo, el ejemplar que tenemos en imágenes es muy diferente ya que se trata de una edición especial, con un propietario especial.

dodge omni carroll shelbypinterest
Mecum

El coche de Carroll Shelby

Hablamos de un automóvil bastante peculiar que se vio afectado positivamente hablando por el cambio de dirección que adoptó Dodge con Lee Iacocca como gran responsable, en busca de inyectar algo de emoción al Omni. Naturalmente, el creador del Mustang decidió recurrir a su viejo amigo Carroll Shelby. Inspirado por el éxito del Golf GTI, la marca estadounidense quería convertirse en un competidor del compacto alemán, de forma que envió el automóvil a Shelby para que este mejorara el rendimiento.

dodge omni carroll shelbypinterest
Mecum

Shelby lo hizo y añadió las siglas GLH al nombre, que son la abreviatura de “Goes Like Hell” (corre como el demonio). No obstante, el ejemplar que protagoniza esta historia es un GLHS, es decir, una edición limitada aún más picante. Limitado a solo 500 unidades, este Shelby Omni cuenta con un motor de cuatro cilindros con un único árbol de levas y una cilindrada de 2.2 litros, desarrollando 175 caballos de potencia. Puede que esta cifra sea discreta para los estándares actuales, pero en aquella época, el Golf GTI solo producía 110 CV en los Estados Unidos. Debido a su relación peso/potencia este coche podía alcanzar las 60 mph (96 km/h) en solo 6,5 segundos.

preview for Le Mans '66 - Trailer

Con menos de 15.000 kilómetros

También podía alcanzar una velocidad máxima de 209 km/h, tenía un volante forrado en cuero y estaba calzado con unos neumáticos Goodyear Gatorback de perfil bajo. Estamos por tanto ante una máquina muy capaz que incluso llegó a sorprender al propio Shelby, quien encargó una unidad para su colección privada, es decir, la misma que tenemos en imágenes. Se trata de la número 86 de las 500 producidas, con la pintura y las pegatinas originales y un total de 8.176 millas en el odómetro (13.158 kilómetros).

dodge omni carroll shelbypinterest
Mecum

Ahora, este ejemplar va a ser subastado por Mecum en Kissimmee, en un evento que se llevará a cabo del 7 al 16 de enero. El precio estipulado oscila entre los 50 y los 75 mil dólares, es decir, entre los 45 y los 60 mil euros, por lo que no tenemos ninguna duda de que algún coleccionista pague esta cifra por este coche tan especial.

dodge omni carroll shelbypinterest
Mecum