DVuelta, la empresa dedicada a la defensa de los conductores, tiene muy claro cual es el cometido fundamental de la nueva Ley de Tráfico aprobada ayer en el Congreso: permitir al Estado recaudar más a través de las multas. Según esta entidad, perteneciente al Grupo Reacciona, los ingresos mediante esta vía se han visto claramente perjudicados por la crisis, registrando un descenso del 30% debido a la caída de los desplazamientos por carretera.
En algunos de los principales ayuntamientos, este descenso ha alcanzado el 50% incluso, según este mismo análisis. La solución para la DGT pasa por una nueva Ley de Tráfico realizada a la medida de las necesidades, apunta Dvuelta que señala a la subida del límite de velocidad a 130 km/h en algunos tramos de autovía como la perfecta cortina de humo para desviar la atención sobre la bajada generalizada de los límites de velocidad en el resto de las vías y calles. En este aspecto, no cabe estudio alguno sobre cuáles son los tramos en que se aconseja su implantación: “bajan todos los límites, desde los 100 km/h actuales, a 90, 80, e incluso hasta 50 km/h. Son las carreteras, por cierto, que la DGT va a sembrar de radares ocultos”, advierte Dvuelta.
En la misma línea, se prohíbe el uso de detectores de radar, que se aprobó hace sólo cuatro años, cuando la DGT afirmó conocer la posición de los radares ayudaría a reducir la siniestralidad dado que su ubicación coincide con aquellos tramos en que el exceso de velocidad puede resultar un riesgo para la seguridad.
Además, Dvuelta considera absolutamente “artificial” el debate sobre el casco para los ciclistas que a partir de ahora tendrán que llevar casco en ciudad sólo si son menores de 16 años, mientras que por otro lado, algunas multas han doblado su importe, pasando de 500 a 1.000 euros, como en el caso de los reincidentes que den positivo por alcoholemia o para aquellos que alcancen o superen los 0,50. La DGT, denuncia Dvuelta, se ha cansado de anunciar “tolerancia cero con la bebida y la conducción” y en lugar de prohibir directamente el alcohol al volante han “permitido que el conductor beba, porque así podemos sacarle el dinero”.
Por último, Dvuelta presentará un Recurso General ante la DGT en el que instará a la Administración a que revise de oficio todos aquellos expedientes sancionadores por exceso de velocidad en los que se hayan denunciado infracciones por sobrepasar el límite de 120 km/h en aquellos tramos en los que se haya producido el aumento del límite a 130 km/h, una vez que se haga efectivo.
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