No sabemos muy bien la razón, pero las estadísticas apuntan a que los vídeos donde un misterioso piloto se acopla una cámara en el pecho y se graba conduciendo distintos coches cada día ya componen uno de los géneros más exitosos en YouTube, al menos para los que amamos el automóvil.
En ocasiones, como en el vídeo que protagoniza este Ferrari 365 GTB/4 'Daytona' de 1972, el simple carácter exótico del vehículo ya es una buena excusa para invertir diez minutos de nuestras vidas en visionarlo.
Pero no contento con eso, el afortunado 'youtuber' Tom Interceptor lanza este ejemplar exquisitamente restaurado a todo lo que aún puede dar. Y sorprendentemente, este veterano se mantiene en plena forma.
Un acelerado paseo inaugural
Como bien cuenta el mismo vídeo, este 365 GTB/4 amarillo acababa de ser restaurado por completo poco antes de la grabación. Siguiendo el consejo de la lógica lo más sensato sería, quizá, realizar un rodaje suave. Pero al youtuber le venció el ansia de corroborar lo que nuestros queridos compañeros de 'Road & Track' dijeron del Daytona en 1970, calificándolo entonces como "el mejor deportivo del mundo".
Y a decir verdad, parece que esta unidad responde perfectamente a dicha calificación. La primera prueba la encontramos en los primeros minutos de la grabación, cuando recién salido de una incorporación a la Autobahn tarda apenas unos segundos en alcanzar los 210 km/h.
Seguidamente, el conductor aprovecha un ligero 'claro' en el tráfico para efectuar la primera 'lanzada' propiamente dicha, que le lleva hasta unos más que respetables 275 km/h. Todo ello, mientras adelanta varias decenas de vehículos sin el más mínimo signo de debilidad mecánica o 'temblores'. Incluso las agujas de los instrumentos se muestran tan firmes como cuando este Ferrari se matriculó por primera vez.
Algo después, en un tramo más largo y algo más despejado, comienza la segunda y definitiva lanzada donde el Daytona termina de demostrar su poderío alcanzando los 280 km/h. Toda una carga de caballería (y nunca mejor dicho) con la deliciosa banda sonora de los seis carburadores Weber 40 DCN21 dando el do de pecho al unísono.
Incluso los últimos minutos finales del vídeo son agradables de ver y escuchar, ya a un ritmo más bien de paseo para dejar pacientemente que todos los materiales regresen a su forma y sus temperaturas naturales. Un epílogo que no sólo nos resume al que fue uno de los primeros supercoches de la historia (y eterno rival del Lamborghini Miura), sino que también nos enseña que el músculo bien entrenado envejece mejor.
Especializado entusiasta en motor, competición, historia y técnica del automóvil. Eterno aprendiz, también, en el novedoso sector de la movilidad sostenible. Licenciado en Periodismo con varios años de experiencia en esto de hablar sobre las cuatro ruedas.
