Con la revolución de los coches eléctricos está llegando también una recuperación de lo retro como han demostrado unos cuando modelos que ya están en el mercado o dentro de poco van a llegar. Y es que esta fórmula también es perfecta para resucitar algún que otro clásico de su retiro para volver a aparecer en las calles con esta técnica cada vez más escuchada del restomod. Un buen ejemplo de esto es Totem Automobili, una compañía que ya tiene listo un clásico Alfa Romeo Giulia GT 100% eléctrico.
Un eléctrico vintage
La intención de Totem Automobili era originalmente presentar este Totem GTelectric en el Goodwood Festival of Speed 2020, pero las circunstancias a causa de la pandemia del coronavirus, y el aplazamiento de la cita, retrasarán un poco las cosas. Ahora, tras una primera entrega de imágenes la compañía nos muestra con todo detalle su ambicioso modelo que se confirma como un coche tan llamativo como exclusivo.
Esta reinterpretación del famoso Alfa Giulia de los 70 cuenta con un tren motriz totalmente eléctrico con la friolera de 525 CV y 940 Nm de par máximo. Suficiente para ofrecer una aceleración en el 0 a 100 km/h en 3,4 segundos poniéndose al nivel de verdaderos supercars. Este motor eléctrico está alimentado por un paquete de baterías de 50,4 kWh con refrigeración líquida con un peso de solo 350 kg y que según la compañía es uno de los más ligeros y seguros de su clase. Con esta capacidad se obtienen, según anuncia Totem, unos 320 km de autonomía "a un ritmo estándar" y además con la ventaja de contar con carga rápida.
Carrocería de fibra de carbono
Además para terminar de redondear el conjunto Totem ha instalado una suspensión Bilstein ajustable de tipo McPherson en la parte delantera y una multibrazo en la trasera de serie, aunque de forma opcional se podrá optar por una suspensión controlada de forma electrónica e incluso una neumática.
Toda esta revolución interior se acompaña de un aspecto exterior que mantiene el mismo estilo clásico y genuinamente italiano del modelo original, aunque con cierto cambios. Para empezar ahora la carrocería es de fibra de carbono con el objetivo de contener aún más el peso final del vehículo, mientras que los faros ahora cuentan con tecnlogía LED y rinden homenaje a los modelos 1750 y 2000, mientras que en la parte trasera se han sustituido los pilotos traseros de aspecto rectangular del modelo original por unos redondos con tecnología LED.
Y es que realmente las posibilidades para personalizar cada modelo a gusto del cliente son muy variadas y afectan incluso a la misma posición de conducción para que cada conductor independientemente de sus medidas encuentre la suya. Además el interior estará a la altura con una combinación de lujo italiano y alta tecnología que incluirá cuero una tapicería de cuero Nappa cosido a mano con un sistema de infoentretenimiento, eso sí de estilo vintage con una pantalla de 3,5 pulgadas, para no desentonar con el aspecto clásico de la cabina.
Además de lucir realmente bien Totem Automobili asegura haber "corregido" la posición de su puesto de conducción, uno de los principales problemas de GT clásicos italianos como este que eran famosos por su falta de comodidad a bordo.
Solo 20 unidades a casi medio millón de euros
Con todo esto no resulta difícil imaginar que este resucitado Giulia no será especialmente barato, y efectivamente la marca lo acaba de confirmar. Porque este Totem GTelectric solo contar previsiblemente con 20 unidades que tendrán un precio de partida de 430.000 euros. Y es que las posibilidades de personalización también serán de lo más interesantes, pudiendo ajustar su potencia y par, su sonido y muchas otras cocsas. Eso sí, su producción no llegará hasta verano de 2022.
Especializado en el mundo del motor, la competición y la tecnología, Antonio Ramos Ochoa es redactor de Car and Driver. Se comenta que antes de bajarse del carro ya iba diciendo el nombre de los coches que iba viendo por la calle. Unos cuantos años después sigue hablando de una de sus pasiones aquí. Aficionado al Motorsport, el cine, videojuegos y la historia, incluso se desfoga de vez en cuando al volante de un kart o un simulador.
