Dentro de unos días, olvídate que los coches camuflados de la Guardia Civil de Tráfico estén ocultos tras un alud o un puente y te 'pillen' por un exceso de velocidad porque la DGT ha comunicado que todos los que estén dentro de sus competencias (hay algunos que no, sobre todo, a nivel local y regional) van a estar anunciados con anterioridad para que cualquier usuario de la vía esté alerta, tanto si son fijos como si son móviles.

Además de esta 'reforma', también se unifican los márgenes de error de estos dispositivos a nivel nacional: desde 30 a 100 kilómetros/hora, el radar 'salta' cuando se sobrepasan 7 kilómetros/hora el límite establecido en ese momento (es decir, si la velocidad máxima es de 50, la 'foto' se hará a partir de 57 kilómetros/hora). Por encima de 100 kilómetros/hora se aplicará la regla del 7% al límite correspondiente. También existe otra novedad y es que el radar distinguirá entre turismos, ciclomotores, furgones, autobuses y camiones, ya que cada uno de estos vehículos suele tener diferentes velocidades máximas dependiendo de la carretera.

En la página web www.dgt.es también se podrán consultar la ubicación de todos los radares

Asimismo, la máxima representante de la DGT ha afirmado que se van a sustituir cerca de 30 radares fijos por otros de tramo de forma progresiva (colocados en los pórticos, controlan una distancia determinada calculando el tiempo que se tarda de pasar por un punto A a otro B, haciendo posteriormente una media de velocidad). Todos estos anuncios se hicieron públicos tanto en rueda de prensa como en la cuenta que la DGT tiene en Twitter (@DGTes).

Las cifras de muertos en carretera que se han registrado durante el pasado enero y que suponen un repunte del 44% respecto al mismo mes de 2014 han hecho cambiar la estrategia de 'castigo'. Según las estadísticas que maneja este organismo público, el 80% de los accidentes se producen en vías secundarias, que ahora van a pasar a estar más controladas. Según Seguí, la directora de este departamento que depende del Ministerio del Interior, el objetivo no es la recaudación, sino la seguridad vial.