Red Bull tiene muchas esperanzas puestas en Honda. El equipo austriaco dejó atrás a Renault tras sus múltiples fricciones durante los últimos años para apostar por el fabricante japonés con el objetivo de dar un salto de rendimiento que le permita luchar cara a cara con Mercedes y Ferrari. Después de varias temporadas esperando una mejora significativa de Renault que nunca llegó, Red Bull decidió arriesgar montando unidades de potencia de Honda.
Honda mostró un avance en rendimiento la pasada temporada con Toro Rosso, aunque los pilotos del equipo de Faenza fueron los que más sanciones en parrilla recibieron por cambios de motor. A pesar de la mejora notable de las unidades japonesas, Red Bull será una de las grandes incógnitas de 2019, si bien en la estructura de las bebidas energéticas son optimistas con respecto a su rendimiento para esta campaña.
De hecho, Helmut Marko afirma que Red Bull podrá disfrutar este año por primera vez del famoso ‘party mode’ popularizado por Mercedes. “Los números nos hacen sentir realmente optimistas, también con respecto al incremento del rendimiento. ¡Podremos celebrar con un ‘party mode’ por primera vez!”, declaró el asesor de la escudería austriaca a Motorsport.com.
Marko asegura que Honda ya está por delante de Renault en cuanto a rendimiento y que ponto Red Bull podrá colarse en la misma liga que Mercedes y Ferrari. “El motor Honda ya está ligeramente por encima del propulsor de Renault. Si combinamos nuestros datos de GPS combinados con los datos proporcionados por Honda, estaremos en la región de Mercedes y Ferrari”, comentó.
Aun así, Marko reconoce que Red Bull no tendrá una temporada fácil en su estreno con Honda y anticipa posibles problemas de fiabilidad. “Somos conscientes que probablemente será complicado hablando de la fiabilidad. Probablemente no podremos terminar la temporada con tres motores. Si escoges los circuitos adecuados, se puede volver al frente en unas vueltas. Ese será el concepto, aceptar conscientemente sanciones si son necesarias”, manifestó.
Red Bull se ha quejado en múltiples ocasiones de la falta de rendimiento de Renault, unas quejas que están justificadas a ojos de Marko. “Estábamos en la categoría B desde el principio. Nos faltaban 70 caballos en clasificación. Dependiendo del circuito, podía ser menos, pero de media siempre estábamos al menos 40 caballos por detrás. Nuestros datos de GPS claramente muestran lo que perdíamos en las rectas y lo que ganábamos en las curvas”, afirmó.
