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Tres de tres. A pesar de los comentarios de situación inaceptable y de las promesas de trabajar para solventar los problemas de cambios de neumáticos, el Gran Premio de Australia de Fórmula 1 no fue una excepción.
Más problemas en el cambio de neumáticos
Tras repetirse en Arabia Saudí los problemas de Bahréin, la estructura con base en Suiza tomo medidas adicionales en sus cambios de neumáticos que prácticamente doblaban el tiempo habitual necesario para este proceso. Sin embargo, esto no fue suficiente y Valtteri Bottas volvió a sufrir un contratiempo que aniquiló cualquier opción de luchar por los puntos.
De hecho, Sauber solo pudo quedar por delante de Esteban Ocon, y gracias a que el francés tuvo que hacer una parada extra por calentamiento en sus frenos, al taponarse el conducto de refrigeración. Aunque en honor a la verdad, y según han revelado desde Sauber, los problemas de Guanyu Zhou tuvieron más que ver con el sistema de anti calado que con los problemas de tuercas.
El veterano ingeniero español Xevi Pujolar explicaba que el origen de los problemas se encuentra en las tuercas, en un material ligero empleado en la construcción de las mismas y que no presentó ningún tipo de problema en parado ni en las tres jornadas de test, pero que en condiciones de carrera se fatiga y la situación se vuelve crítica. El hecho de que las condiciones de carrera no puedan ser simuladas de ninguna forma, dificulta la solución.
La solución, en manos de terceros
Sauber confirma que la construcción corresponde a una empresa externa que ya está trabajando en ello pero que es un proceso que lleva su tiempo. El equipo de Hinwil también ha confirmado que no es viable usar el material del pasado año ya que la nueva suspensión delantera provoca que no sea compatible.
De momento, a Valtteri Bottas y a Gaunyu Zhou solo les queda esperar que las nuevas tuercas lleguen a tiempo para Japón, ya que si bien lo más llamativo de la temporada ha sido la ausencia de Williams por la falta del chasis de reserva, lo cierto es que las tres carreras de Sauber se han visto arruinadas por los problemas en parada.