La vuelta de Renault a la Fórmula 1 tiene como gran objetivo volver a triunfar en el Gran Circo, algo que saben que les llevará tiempo. Ya en este 2016 el chasis de su nuevo RS16 es bastante similar al del Lotus E23 que utilizó el equipo en 2015 y, sin considerar la temporada que comienza en Australia en marzo como un año perdido, sí que tienen claro que podrán trabajar mucho antes en el monoplaza de 2017 al no tener nada que perder este curso.

"¿Vamos a introducir un coche que tenga éxito durante la temporada? En primer lugar vamos a ver dónde estamos en Melbourne, y luego nos haremos una idea clara acerca de la normativa de 2017", dijo Frederic Vasseur, jefe del equipo Renault al diario L’Equipe.

Por su parte Gerard Lopez, aún con acciones del equipo, es de los que piensa que deben aprovechar la posición en la que afrontan la temporada, con el equipo en plena reconstrucción, para centrarse cuanto antes en el cambio generacional que se espera en 2017.

"A diferencia de otros equipos, podemos concentrarnos plenamente en la nueva generación de vehículos de 2017", ha apuntado.

En lo referido a este curso, en el que la gente de Lotus trabajará de nuevo con la de Renault bajo el paraguas de la marca francesa, Alan Permane ve cambios positivos desde la última relación que tuvieron con el equipo en 2014.

"No hay comparación con entonces (2014). La facilidad de conducción es excelente, y el estado de ánimo entre la gente de motores es muy diferente. Ellos tienen un plan y ya no tienen miedo de que algo pueda salir mal", ha concluido.