Los aficionados y los expertos coinciden en que el Gran Premio de Brasil, celebrado el domingo pasado, fue demasiado monótono. El campeón del mundo, Lewis Hamilton, lo llamó "aburrido", después de que tuviera que seguir la misma estrategia con el equipo Mercedes que su compañero de escudería Nico Rosberg. Pirelli está asumiendo parte de la culpa de que las carreras del 2015 no fueran emocionantes es suya.

"Es posible que hayamos sido excesivamente conservadores este año, porque hemos visto demasiadas estrategias a una sola parada", admite el jefe de Pirelli, Paul Hembery, para UOL Esporte. "Esto no está en consonancia con lo que queremos y con lo que nos pidieron que debíamos hacer, el conseguir ir a dos o tres paradas", añade.

Hembery señala que el problema que estaba sopesando Pirelli, es la solicitud de unos neumáticos que se degradasen en beneficio del 'espectáculo', cuando las pruebas están estrictamente limitadas. "Con esa falta de pruebas, estábamos muy limitados en la cantidad de cambios que podemos hacer", apunta, añadiendo que las cosas se estabilizaran para el 2016, pues se trata de otra temporada con las mismas reglas, antes de los cambios a las nuevas normativas de chasis, motor y neumáticos en 2017.

"Las reglas cambiaran drásticamente, aunque en realidad no sabemos todavía en lo que van a cambiar. Es preciso entender que necesitamos tener un aumento significativo en el número de pruebas. No hay ninguna empresa en el mundo que pueda hacer lo que hemos hecho sin pruebas", insiste finalmente.