Toro Rosso llega al Gran Premio de Italia con la motivación de dar un plus por ser su carrera de casa. Tras la gran actuación de Max Verstappen en Spa-Francorchamps y de las buenas sensaciones que dio el STR10 pese a los problemas de Carlos Sainz, los de Faenza confían en repetir una actuación similar y poder dar guerra en la zona media para luchar por más puntos.
"Monza es un clásico, un circuito de la vieja escuela…¡todos los pilotos adoran correr allí!", ha dicho Sainz, que este martes 1 de septiembre cumple 21 años. "Disfruté mucho allí el año pasado (logró dos Poles y una victoria en la Fórmula Renault 3.5), pero pilotar un Fórmula 1 allí y alcanzar una de las velocidades más altas del año…debe ser un chute de adrenalina, ¿eh?. No puedo esperar más a subirme al coche incluso si tengo que cambiar el motor, pero esta especificación pareció funcionar bastante bien en Spa. Me mantengo positivo incluso si tengo una penalización de diez posiciones en parrilla. Realmente quiero ganar aunque sea esas posiciones en carrera", ha señalado.
Por su parte, Max Verstappen ha coincidido con su compañero en las ganas que tiene de correr en el Templo de la Velocidad, pues lo considera un circuito con características que le harán disfrutar aunque sabe que no es el más idóneo para el STR10.
"No puedo esperar, es el tipo de pista en la que disfruto: alta velocidad, grandes zonas de frenada y una atmósfera única. La única vez que piloté allí fue el año pasado durante un test de la F3 pero correr all'debe ser una gran sensación. Aunque Monza no es el mejor trazado para nosotros en términos de velocidad, daré el máximo. Es la carrera de casa para el equipo, así que definitivamente va a ser especial para nosotros y todo el mundo estará extramotivado. Ojalá podamos lograr otro buen resultado y sumar algunos puntos más", ha concluido.
