Felipe Nasr vuelve a defenderse de las críticas de aquellos que le acusan de ser un 'piloto de pago'. El brasileño llegó a Sauber con cerca de 17 millones de euros bajo el brazo, con el aval de Banco do Brasil, pero también después de conseguir el título en la Fórmula 3 británica y el tercer puesto en la GP2 con 22 años. Nasr se defiende asegurando que su patrocinador es uno más dentro del mundo del motor.

"Creo que es un poco estúpido que la gente piense eso. Es ser un poco corto de miras porque creo que más países deberían seguir este ejemplo de apoyar a sus propios pilotos", ha señalado el brasileño a Sky Sports. "Llevo con Banco do Brasil los últimos cuatro o cinco años, teníamos un proyecto con mi carrera y hemos pasado por etapas duras. Estoy encantado de decir que nunca he pagado por pilotar", añade.

"Cuando tenía 16 años tuve ofertas de Red Bull, Gravity y otros programas de pilotos, pero opté por irme con Steve Robertson y he seguido trabajando con él hasta ahora. A los 16 años tuve mi propio coche, mi propio salario, mi propia casa y nunca he pagado en los campeonatos en los que he participado. Creo que más gente debería seguir este ejemplo y tener este tipo de compañías apoyando a sus propios pilotos. Creo que la gente lo interpreta de forma equivocada", ha insistido Nasr.