El presidente de Ferrari, Sergio Marchionne, asegura que se deberían relajar las reglas de los motores para 2016 para que los equipos no lleguen a quebrar. La FIA determinó que las reglas para 2016 no permitirán desarrollar las unidades de potencia más allá del 28 de febrero y ya han aparecido las primeras reacciones.
El jefe de Red Bull, Chrisitan Horner, ya ha avisado de que Renault podría irse si no se le permite actualizar durante la temporada. Ferrari, Renault y Honda podrían intentar descongelar las reglas, pero para ello necesitan tener el apoyo de Mercedes. Aunque Marchionne está abierto al cambio, también reconoce que se tiene que hacer de manera que asegure a los fabricantes que no vayan a la quiebra.
"El problema de abrirte es que tendrás un montón de iniciativas de la parte de ingeniería que te enviarán a la quiebra. Este deporte consume el dinero a la velocidad de la luz, no son sólo los pilotos los humanos más caros que conozco. Es el coste de mantener la ingeniería y la infraestructura de desarrollo la que te pondrá entre la espada y la pared. Ya tenemos restricciones económicos para que algunos de los equipos pequeños compitan. Si nos abrimos, de forma ilimitada, abriremos los presupuestos sin límite. Necesitamos encontrar una manera para mantener los costes bajo control, pero es un equilibrio divertido, ¿cómo sabes dónde tienes que cortar? Quisiera hablar con todo el mundo para hacer esto y creo que Mercedes entiende que bloquer las reglas para intentar proteger su posición no es lo correcto. La gente que cree que tienen una competitividad indestructible deberíamos recordarles lo que le pasó a Ferrari cuando paró de ganar. Pensábamos que éramos invencibles, pasamos por seis años horribles de los que estamos saliendo ahora. Nada permanece. La competición nivelará la parrilla así que vamos a ser racionales y a evitar la quiebra", explica.
Así, Marchionne cree que las reglas iniciales se diseñaron de manera no adecuada y resultaron en la situación que se ha materializado ahora. Además, lo que querían hacer los que tenían el poder antes también tuvo parte de culpa, según él.
"Este deporte, las reglas y la manera en la que se construyen son el resultado de varios intentos de personas que han estado en el poder o cerca en ciertas temporadas, de intentar proteger su posición competitiva. Ferrari tiene tanta culpa como Mercedes. Lo entiendo porque habríamos hecho lo mismo si estuviéramos en esa posición. Pero, ¿es lo correcto para el deporte? Probablemente no", finaliza.
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