El próximo 17 de junio comenzará el proceso para elegir qué suministrador de neumáticos trabajará en la Fórmula 1 entre 2017 y 2019. Pirelli ya ha anunciado que se presentará a las pruebas, aunque ha exigido unos mínimos, sobre todo relacionados con la seguridad, para volver a ser el principal fabricante de gomas de este deporte.

"Vamos a intentar seguir si estamos de acuerdo con las normas", ha señalado Marco Tronchetti Provera, alto ejecutivo de Pirelli. "Siempre que sea asequible y que la garantía de seguridad que tengamos en el contrato sea aceptable. Queremos normas similares a las actuales pero con más pruebas, para tener el mejor producto posible. Queremos ayudar a crear emociones, pero siempre con el nivel de seguridad más alto", añade.

En cuanto a las pruebas, Provera ha señalado que esperan ampliar el número de tests. "Si esperamos hasta febrero es muy tarde y la temperatura no es la correcta. Será mejor para nosotros y, por tanto, para los equipos", comenta. Además, ha salido en defensa de la marca, de la que dice que lo fácil sería hacer gomas que durasen diez carreras y que, tecnológicamente, lo difícil es conseguir que una rueda dure sólo entre 15 o 30 vueltas con altos niveles de seguridad. "Es un gran reto", ha aclarado.

Por último, Provera se ha referido a los rumores que circulan en torno a posibles neumáticos con llantas de 18 pulgadas. Según él, Pirelli no tendría problemas en construirlas, más si cabe, tras mostrarlas en la GP2 en Mónaco. "Enseñamos las llantas de 18 pulgadas, pero estamos preparados para hacerlas de 20. No estamos preocupados por ello. La tecnología de las ruedas se basa en materiales y éstos están basados en una estructura. Esa estructura puede ser de 13, 15 o 18 pulgadas, no es un problema", ha sentenciado.