Con cuatro pruebas disputadas en la temporada 2015, muchos de los focos están centrados en el nuevo reglamento que pretende introducirse de cara a 2017 y en el que los motores y los presupuestos son los grandes protagonistas.

En esta ocasión ha sido Max Mosley, expresidente de la FIA, el que ha dado su opinión al respecto y aboga por un reglamento totalmente libre a cambio de la firma de un límite presupuestario como propuesta para la reunión del Grupo de Estrategia en mayor

Esta idea, de llevarse a la práctica, daría a los quipos mucha más libertad técnica para conseguir el coches más rápido posible sin ningún tipo de restricción salvo la del dinero.

"Podría imaginar que muchos equipos estarían pronto en el objetivo presupuestario marcado", ha expresado a la publicación alemana Auto Motor und Sport. "Así es como se darían cuenta de que con 100 millones de dólares pueden tener una gran competición de motor y construir coches técnicamente muy avanzados".

El Gran Circo, sobre el cual la presión aumenta por la necesidad urgente de abordar temas como la vuelta al V8 o mantenerse con los V6 y el recorte de gastos, se enfrenta a un serio problema de pérdida de audiencia.

Monisha Kalterborn ha señalado que estos son los temas más importantes a tratar y resolver en lo venidero: "El elemento clave tiene que ser la paridad de las unidades de potencia y debes incluir a los fans en el debate", ha dicho a la web oficial de la Fórmula 1. "No importa lo que pienses sobre el sonido de los motores, hay que coger las cuestiones planteadas por los fans - y si hay opción de cambiarlo - ver lo que quieren y si se puede hacer", ha finalizado.