La carrera de Sepang es muy probablemente la más dura de todas, tanto para los pilotos como para sus mecánicas. En el segundo caso el tema se solventa con derivas, aberturas, radiadores específicos, y derivas que lleven aire fresco a las partes que más calor desprende. Pero en el caso de los pilotos el problema se complica porque añadir sistemas similares añadiría peso al conjunto, algo directamente impensable, así que los pilotos tendrán que asumir el esfuerzo extra con una preparación específica.

Edoardo Bendinelli, fisioterapeuta (y cuñado) de Fernando Alonso, aclara los detalles de la preparación previa para esta prueba en la web oficial del piloto asturiano. "No hay una fórmula mágica por la que alguien pueda llegar a Sepang y no sufrir este calor", explica Edoardo. "La verdadera preparación debe comenzar un mes antes, intentando realizar ejercicios aeróbicos en condiciones climáticas lo más similares posibles a las que encontramos en Malasia, en el mismo momento del día en el que tiene lugar la carrera, para así adaptar el cuerpo a este tipo de esfuerzo. Ya estamos en Kuala Lumpur para adaptarnos rápidamente a la gran diferencia de temperatura que hay con respecto a Melbourne, pero sobre todo, al nivel de humedad, que usualmente es el doble del que encontramos en Australia. En los días previos al fin de semana de carrera, hacemos actividades como salir a correr, jugar al golf y otro tipo de deportes que mantienen un alto nivel cardiovascular, siempre compatible con las condiciones. Se trata, básicamente, de mantener siempre un buen nivel de entrenamiento, incrementando ciertas actividades específicas que van mejor con la carrera”.

Después, durante el mismo fin de semana, realizamos algunas sesiones cortas de recuperación en el gimnasio o en la piscina, para tratar de 'drenar' el cuerpo del piloto lo máximo posible", explica Edoardo.

Otro de los aspectos clave para este Gran Premio es la hidratación. No hay otra carrera en la que el piloto pierda tanto líquido como en Sepang, por esto, Bendinelli afirma: "Es muy importante beber mucho antes de salir a la pista, alternando agua con una bebida hidratante, sin pasarse con lo segundo. Luego, una vez en el coche, necesitas adaptarte; la cantidad disponible de líquido es siempre la misma, y tan sólo después de unas pocas vueltas se alcanzan temperaturas altísimas, y el mono no permite una correcta salida de calor al exterior. Recuerdo que, hace unos años, Fernando perdió cerca de tres kilos y medio de líquido durante la carrera. Eso te da una idea de las condiciones extremas a las que se enfrentan los pilotos en Malasia. Para tratar de aliviar este malestar uno intenta mantener ciertas partes claves del cuerpo con el mayor frío posible hasta el último momento, usando, por ejemplo, toallas húmedas alrededor del cuello justo antes de entrar en el coche en la parrilla, o metiendo los pies en agua con hielo antes de ponerse las botas".

Otra parte importante es la comida y el descanso previo a la dura carrera. "En un Gran Premio como éste, el piloto debe hacer comidas ligeras, basadas, sobre todo, en fruta y verdura. A su vez, debe tratar de descansar lo máximo posible", concluye Edoardo. "Fernando es también un campeón en este área y por la noche siempre se las arregla para dormir profundamente y del tirón".