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Si el mundo de los camper, autocaravanas y caravanas no está de suficiente actualidad, no paran de llegarnos nuevas propuestas cada vez más interesantes. Desde Alemania llega el Caracat 860, una caravana-embarcación con un diseño realmente conseguido que ofrece todas las funcionalidades de una vivienda sobre ruedas y de un barco. La empresa alemana del mismo nombre ha patentado la idea de prolongar hacia abajo los laterales de la caravana para conformar los pontones que la convierte en un catamarán. El diseño exterior está realmente logrado y no parece ni un barco ni una caravana al uso, además de que el cliente puede personalizar su aspecto con diferentes acabados.
Se ofrece en tres posibles longitudes, con seis, 7,60 y 8,60 metros de largo, lo que permite variar la capacidad interior para cuatro o seis pasajeros. Su techo puede elevarse para ampliar la altura interior y también se puede configurar para disponer de una amplia terraza exterior. Cuenta con dos pequeñas terrazas, una en la proa y otra en la popa, además de un conjunto de paneles solares de 200 watios que también pueden desplegarse para alimentar todos los accesorios interiores de la embarcación. El equipamiento es realmente completo y no se echa en falta nada, pues cuenta hasta con baño completo e inodoro, cuyos residuos se procesan directamente dentro del propio Caracat, según asegura la empresa.
Con emisiones cero
Caracat puede moverse en el agua con cualquier sistema de propulsión pero está pensado para utilizar energía eléctrica. También puede moverse con un fuera borda gasolina de ocho o 15 CV o un diesel de hasta 25 CV. De la misma forma para todas las comodidades interiores el cliente puede elegir entre varios sistemas de energía como gas, diesel-eléctrico y, por supuesto, solo eléctrico para calefacción, aire acondicionado y equipo de cocina.
El cliente puede configurar y personalizar el interior a su gusto, pero el equipamiento de serie ya es bastante completo y lujoso, con suelos interiores y exteriores de teca, techo interior de Alcantara, tapicerías de cuero, electrodomésticos de la mejor calidad, televisión que se oculta en la encimera, equipo de sonido Boss y unos acabados de primera. “Ya no hay distinción entre mar, lago, río o tierra. Hemos creado un hogar que te pertenecerá donde quieras”, asegura la empresa en su publicidad.
Para conducir la caravana-catamarán no hace falta un permiso especial, según declaran desde Caracat y basta con el permiso B1 para disfrutar de su polivalencia. Ni siquiera para navegar hace falta una licencia especial. De momento no se han comunicado los precios del Caracat 860, pero por sus características no será precisamente barato.
