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Este Ford Escort RS Turbo es un ejemplar único y no sólo por haber sido estrenado y utilizado durante varios años por Diana de Gales. Precisamente los cambios que se realizaron en él para “adaptarlo” a la princesa son los que lo convierten en único. Diana de Gales ya había mostrado su predilección por el Ford Escort, modelo del que ya había tenido dos unidades, uno de ellos un Cabrio rojo con el que fue fotografiada en innumerables ocasiones. Los servicios de seguridad de la Casa Real británica consideraron que no era un vehículo adecuado para la princesa. Un techo de lona manual no ofrecía ninguna privacidad y la protección era escasa en caso de que alguien se acercara al coche.
Un RS Turbo cuidado como un príncipe
En 1985, cuando ya era madre de sus dos hijos los príncipes Guillermo y Enrique, Diana de Gales eligió de nuevo un Escort para sus desplazamiento por Londres, ya que parece ser que no le gustaba conducir en sus trayectos más privados los grandes y lujosos modelos que había a su disposición en palacio. Quería un coche más manejable y ágil para la ciudad y se decantó nuevamente por el Ford Escort pero en este caso por un RS Turbo. La primera serie del potente Escort solo se había fabricado en un blanco inmaculado y el servicio de seguridad de la princesa pidió a Ford el coche en un color menos llamativo. La marca lo pintó en negro, con lo que se convirtió en el único RS Turbo S1 en este color. También le cambiaron la parrilla frontal por la de cinco lamas que llevaban todos los Escort de la época, en lugar de la que montaba el RS Turbo, y se instaló en la guantera una radio que utilizaba el escolta que siempre acompañaba a Diana, una radio que todavía conserva el coche.
Lady Di utilizó el Escort RS Turbo hasta 1988, cuando fue devuelto a Ford Motor Company con solo 6.800 millas, unos 10.900 kilómetros. En ese tiempo la princesa fue fotografiada en numerosas ocasiones por las calles de Londres, incluso llevando al príncipe Guillermo en el asiento trasero. El RS Turbo fue adquirido por un nuevo propietario y en su periplo de estos últimos 37 años incluso formó parte de un concurso promocional de Kiss FM en el Reino Unido. Lo cierto es que el coche ha llegado hasta hoy en perfecto estado (casi de concurso) y con solo 24.961 millas, unos 40.000 kilómetros, comprobados y certificados en las minuciosas revisiones que se han realizado de su historial de inspecciones.
El Escort del millón de euros
El Escort RS Turbo salió a subasta este pasado fin de semana, concretamente el 27 de agosto, solo cuatro días antes de que se cumplan 25 años del trágico accidente que le costó la vida a la Princesa en un túnel de París. El precio de salida solo lo conocían los interesados inscritos en el evento celebrado por Silverstone Auctions, pero ahora ya lo conocemos todos y es que este interesante automóvil ha encontrado nuevo propietario tras haberse pagado por él la friolera de 857.712 libras, es decir, un millón de euros aproximadamente.
Cabe destacar que esta suculenta cantidad es diez veces mayor que la lograda por el otro Escort de la princesa Diana en una subasta celebrada el pasado año. Hablamos de un Ford Escort de 1981 que era mucho más discreto y no contaba con las especificaciones RS.
