Del Lamborghini Urus podemos decir muchas cosas, pero no que es un lobo con piel de cordero ya que su agresiva estética, sus formas aerodinámicas, las cuatro salidas de escape, sus grandes llantas y el rugido de su V8 son un indicativo de lo que se oculta debajo del capó. Sin embargo, el ejemplar que está en posesión de toda una celebridad como Kim Kardashian es diferente y es que exhibe una decoración de lo más extravagante que encaja a la perfección con la famosa frase.
¿Demasiado hortera?
En su perfil de Instagram, la estadounidense ha compartido una serie de fotografías de su querido automóvil y es seguro pensar que muchos entusiastas de la marca italiana se estarán tirando de los pelos cuando vean al Urus cubierto de ¡piel de cordero! Efectivamente, la expareja del rapero Kanye West ha optado por recubrir toda la carrocería con este material de color blanco, incluidas llantas, paragolpes y retrovisores, aunque el tratamiento no acababa ahí ya que el habitáculo también se ve afectado.
Esta peculiar creación le ha servido a la celebridad para dar a conocer su tienda Skims, y quien sabe si para abrir la mente creativa de algún propietario del Urus que estaba pensando en hacerle algunos retoques a su máquina. No estamos seguros de si este tratamiento a base de piel de cordero es legal en la calle, pero de serlo acaparará todas las miradas y no es para menos. Eso sí, sucio es un rato.
Una bestia con más de 600 CV
Recordemos que el Lamborghini Urus es uno de los SUV más deportivos del mercado, propulsado por un motor V8 biturbo de 4.0 litros que desarrolla 650 caballos de potencia y un par máximo de 850 Nm. Este bloque va asociado a una caja de cambios automática de ocho velocidades por convertidor de par que trabaja en consonancia con un sistema de tracción total que permite al modelo italiano alcanzar los 100 km/h en apenas 3,6 segundos, con una velocidad máxima de 305 km/h.
Esta no es la primera vez que vemos un vehículo tan singular propiedad de una celebridad pues hace unos meses fue Justin Bieber quien nos sorprendió, con un Rolls-Royce personalizado que parecía sacado de una película de ciencia-ficción. No obstante, hay otros como el actor Kevin Hart que sí tienen un buen gusto para los coches y la mejor prueba es su colección de muscle cars, dentro de la cual se incluye un Dodge Charger con ¡más de 1.000 CV!
