Tras la anulación de la primera etapa, el Dakar 2016 se puso en marcha ayer con la segunda etapa, reducida de los 510 kilómetros previstos a 387 debido a las fuertes lluvias. Con gran predominio de las pistas rápidas, Sébastien Loeb pudo lucirse por primera vez en la prueba, demostrando que no ha venido a aprender, sino a ganar la prueba. El nonacampeón del mundo de rallies, gran conocedor de los terrenos por los que pasó ayer la caravana del Dakar, fue el más rápido en la categoría de coches, cruzando la meta con más de dos minutos de ventaja sobre su compañero de equipo Stéphane Peterhansel, segundo clasificado.

Por detrás de los dos Peugeot 2008 DKR llegaron los Toyota del ruso Vassiliev y del surafricano Giniel de Villiers. Para encontrar el MINI más rápido hay que irse hasta la quinta posición, lugar ocupado por Mikko Hirvonen, mientras que Nasser Al-Attiyah, vigente campeón del Dakar y también piloto Mini, acabó la etapa en la octava plaza.

Los competidores españoles no corrieron buena suerte en la jornada de ayer. El mejor fue Carlos Sainz, que cruzó la meta en decimocuarta posición tras parársele el motor en el kilómetro 112, donde ha estado detenido catorce minutos, al parecer por problemas eléctricos. Tras arrancar su Peugeot 2008 DKR, Carlos y Lucas Cruz han sido los más rápidos en el resto de la especial. A la llegada al Vivac, Sainz declaró: "Ha sido una lástima, rodábamos a un buen ritmo, y cuando hemos llegado al kilómetro 112 se nos ha parado el motor. Después de catorce minutos ha vuelto a arrancar sin hacer nada y hemos podido rodar con normalidad".

Por su parte, Nani Roma vivió un día muy complicado al quedar embarrado en el fango. El piloto de KH-7 tardó mucho en poder sacar su Mini ALL4 Racing del lodo y, tras reincorporarse a la carrera, acabó cediendo 46 minutos y 48 segundos respecto al líder y vencedor de la etapa, Loeb. Otro español, el debutante Xavi Pons, sufrió el mismo problema, y tras haber finalizado la etapa prólogo en el tercer lugar, ayer perdió 1 hora y 33 minutos respecto a la cabeza.

Hoy se celebrará la tercera etapa entre Termas de Río Hondo y San Salvador de Jujuy de 663 kilómetros y un tramo cronometrado de 314. Pistas estrechas y caminos montañosos en la parte final de la especial cronometrada, forman esta jornada que se prevé que sea más complicada de lo que aparentemente podría ser debido a las lluvias que están castigando la zona.