Y es que en las últimas fechas el precio del combustible se ha disparado. Ya sea por la crisis económica, por un creciente consumo de energía de países como China o India, o porque cada vez queda menos –aunque no tan poco como nos hacen creer-, el petróleo es más “oro negro” que nunca.

La Federación de Usuarios-Conductores Independientes -FUCI-, basándose en datos del Boletín Petrolero de la Unión Europea, ha calculado el incremento que han sufrido los carburantes desde 2009. Las cifras son sorprendentes, ya que desde hace apenas 3 años, el precio del litro de la gasolina se ha incrementado en nuestro país, de 0,875 euros hasta los 1,367 que ronda en la actualidad. El gasoil tampoco se queda atrás y ha pasado de 0,869 euros/litro en 2009 hasta los 1,36 actuales. Estas diferencias representan un incremento del 56% y 57% respectivamente.

En CARandDRIVER nos hemos preguntado cuanto supone este aumento para nuestro bolsillo en un viaje tipo Madrid-Barcelona, ida y vuelta, que hacen un total de 1246 kilómetros. Si partimos de un coche de gasolina, con cuatro o cinco ocupantes y cargado, y un consumo medio de 9 litros cada 100 kilómetros, el viaje nos costaría sólo por el incremento del precio de la gasolina 56 euros más que en 2009. Si sumamos el incremento de peajes –según el IPC- la cifra se acercaría a unos 60 euros más, una cantidad respetable.

En el caso del mismo ejemplo pero esta vez con un vehículo diésel con un consumo medio en el viaje de 7 litros a los cien, las diferencias son menores pero también importantes. Nada menos que 42 euros más nos costaría realizar el mismo trayecto que en 2009 debido a la subida de precio de la gasolina.

Estos datos llevarán a más de uno a sacar la calculadora y echar un vistazo a otros medios de transporte, como el avión o el tren, que si bien no dan tanta libertad como un coche, si que podrían encontrarse a un precio más asequible. En optar por el automóvil, siempre podremos utilizar algunos trucos para repostar más por menos.