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Sobre los perros considerados como peligrosos (por su raza o características) y sus instintos agresivos existen mil y una teorías. Pero lo cierto es que incluso el mejor adiestrado de estos animales puede dejarse llevar por dichos instintos en un momento dado. Y las consecuencias de ese 'desliz' pueden ser fatales.

Afortunadamente en esta ocasión la víctima, una usuaria estadounidense de TikTok llamada Liv y conocida en la red social como 'toodiesangelxx', pudo refugiarse sin un rasguño en su Tesla Model 3 cuando se percató de que un 'pitbull' que andaba suelto por la calle se dirigía hacia ella. No obstante esa acción no fue sino el principio de varios angustiosos minutos durante los cuales el can, viendo imposible atacar a la mujer, la emprendió con el exterior del coche.

Naturaleza desatada y un fenómeno viral

El vídeo compartido en TikTok comienza con la imagen del perro mordisqueando uno de los pasos de rueda de la carrocería, hundiendo sus colmillos directamente en la chapa. Para grabar esto último con su smartphone la tiktoker había mantenido la ventanilla del conductor ligeramente bajada, por cuya abertura el perro intenta después abrirse paso.

Al no conseguir alcanzar a la mujer, el animal dirige sus fauces hacia el marco de goma de los cristales, apresándolo de un mordisco y tirando de él hasta casi extraerlo por completo.

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El vídeo, de unos 28 segundos de duración, concluye con fotos del estado de las dos aletas del Model 3 dañadas por el pitbull. Dos imágenes que, aun teniendo en cuenta la gran fuerza de mordida que poseen los perros de esta raza (una de las mayores del mundo, con 1,62 kg/cm2) sorprenden igualmente por la magnitud de las abolladuras y deformaciones.

tesla model 3 pitbullpinterest
toodiesangelxx / TikTok

Como estamos acostumbrados a que en Internet todo sea opinable, al viralizarse su vídeo muchos usuarios de TikTok preguntaron a Liv por qué no se alejó del perro conduciendo. En una segunda publicación ella respondió que estaba esperando la llegada de la policía con la intención de localizar y denunciar a los dueños del animal. Y es que, en Estados Unidos, una demanda de este tipo puede comportar una cuantiosa indemnización para la víctima.

Lettermark
Diego García

Especializado entusiasta en motor, competición, historia y técnica del automóvil. Eterno aprendiz, también, en el novedoso sector de la movilidad sostenible. Licenciado en Periodismo con varios años de experiencia en esto de hablar sobre las cuatro ruedas.