Hoy es un día triste para los amantes del mundo del motor en general y de Lotus en particular ya que tres de los deportivos más emblemáticos del Reino Unido nos acaban de decir adiós. Se trata, por tanto, del final de una era y del comienzo de otra nueva, en la que ya no estarán presentes los Lotus Elise, Exige y Evora pues la fabrica de Hethel ha concluido su producción para siempre. Ahora, todos los esfuerzos se centrarán en preparar la factoría para la nueva etapa eléctrica de la marca, una en la que el primer SUV de Lotus se posicionará como el gran protagonista.
Adiós definitivo
El fabricante de automóviles deportivos con sede en Norfolk presentó el Elise Serie 1 en 1996, seguido del Exige en 2000, y del Evora en 2009. Los tres recibieron muchos derivados a lo largo de los años, con la planta de Hethel fabricando un total de 51.738 ejemplares durante este intervalo de 26 años, lo que supone casi el 50% de la producción total de Lotus desde que Colin Chapman la fundó allá por 1948. Además, la citada planta sirvió para fabricar un total de 9.715 vehículos deportivos para clientes externos, incluidos General Motors y Tesla.
En este sentido, cabe recordar que la “plataforma de automóvil pequeño” de Lotus, es decir, la que utilizan los Elise y Exige también se usó para los 340R, Europa, 2-Eleven y 3-Eleven, así como otros modelos que no son de Lotus como el Opel Speedster (Vauxhall VX220) y el Tesla Roadster de primera generación. En conjunto, la producción total de la fábrica de Lotus asciende hasta los 56.618 vehículos. Por otro lado, aunque no se menciona en el comunicado de prensa, el Hennessey Venom GT –del que solo se fabricaron 13 unidades– utilizó esa misma plataforma, aunque muy modificada.
Si volvemos a la fotografía que preside estas líneas, el trío de automóviles que pone el punto y final a la producción de los citados tres deportivos está representado por un Elise Sport 240 Final Edition de color amarillo, un Exige Cup 430 Final Edition en un tono verde Heritage Racing Green y un Evora GT430 Sport en gris metalizado oscuro. Ninguno de estos ejemplares se venderá, ya que se convertirán en miembros permanentes de la colección patrimonial de Lotus. La compañía, propiedad de Geely, ha producido 35.124 ejemplares del Elise, 10.497 de los modelos Exige, junto con 6.117 del Evora.
Turno del Emira
“Estos automóviles icónicos no solo han jugado un papel muy importante en los 73 años de historia de Lotus, sino que también han estado siempre presentes en mi vida diaria. Junto con el equipo de diseño de Lotus, he vivido y respirado estos coches durante más de 26 años. Los extrañaremos, pero un poco como la Navidad, una vez que termine, la emoción por el próximo comienza a crecer, y eso es lo que está sucediendo ahora en Lotus con el Evija, Emira y el próximo Type 132. 2022 va a ser un gran año a medida que una nueva generación de Lotus entra en acción”, señala Russell Carr, director de Diseño de Lotus Cars.
Los tres serán reemplazados por el Emira, el último Lotus con motor de combustión, que entrará en producción la próxima primavera en la misma planta donde también se ensambla el Evija, el hypercar totalmente eléctrico y de serie limitada. Lotus ampliará su cartera el año que viene con la presentación de un SUV eléctrico, el Type 132, que se ensamblará en una nueva fábrica en Wuhan, China
Especialista en temas de motor y tecnología. Apasionado de la mecánica y las cuatro ruedas desde niño, ahora trato de transmitir mis experiencias a todo aquel que disfrute con el olor a gasolina, la velocidad, el placer de conducir, el diseño y el sonido de esos motores que nos ponen los pelos de punta
