La reducción de consumo y emisiones por medio del famoso downsizing sigue afectando a más de un modelo, incluso deportivos. Motores más pequeños pero que en la mayoría de los casos consiguen conservar la misma potencia o más que sus predecesores, aunque por el camino se pierda algo de ese sonido y carácter de los motores "gordos".
Es el caso del Mercedes Clase C de AMG, hasta hace no tanto un modelo que seguía presumiendo de un V8 en sus versiones más top pero que sin embargo ahora llegará a tener incluso un motor de cuatro clindros en su gama más deportiva. Un compacto propulsor que eso sí, no irá falto de prestaciones.
Potencia de alto nivel en frasco pequeño
Nuestros espías ya habían cazado en un nevado paisaje a este curioso modelo que por sus impresiones dejaba ya un característico sonido de motor de cuatro cilindros. Sin embargo es ahora cuando podemos verlo con un camuflaje mucho más ligero y sus ópticas de serie equipadas y un aspecto que nos hace ver que este es un AMG, aunque eso sí menor a un C 63 por ejemplo.
Entre los detalles que lo delata podemos ver por ejemplo la característica parrilla panamericana, aún bien tapada, mientras que en la parte trasera esta versión también cuenta con la característica cuádruple salida de escape, aunque en este caso con formas redondas, a diferencia de los AMG más salvajes con salidas cuadradas como nos tienen acostumbrados. Por supuesto tampoco falta en el menú unas deportivas llantas multirradio de gran diámetro y unos frenos de alto rendimiento.
¿Electrificación al rescate?
Por lo demás su camuflaje no nos permite ver aún mucho más sobre cómo será su aspecto final, aunque la verdadera novedad llegará bajo el capó. Y es que como ya adelantamos hace un tiempo el Mercedes Clase C de próxima generación contará en sus modelo AMG con el famoso motor M139, más conocido como el propulsor de cuatro cilindros de producción más potente del mundo. Un bloque de 2.0 litros de cilindrada y un único turbocompresor twinscroll ya equipado en el Mercedes-AMG A 45 y CLA 45 donde rinde la friolera de 421 CV y que en este modelo irá incluso más allá gracias a la ayuda de un sistema mild hybrid EQ Boost que incluirá un compresor eléctrico y un motor-generador eléctrico, y que como en otros modelos de Affalterbach hará acto de presencia para ofrecer consumos y emisiones reducidas con las que cumplir los objetivos de la marca.
Según adelantó Autocar hace un tiempo puede que este motor de cuatro cilindros también llegue a su hermano mayor, el C 63, donde también acompañado de un impulso eléctrico podría superar los 510 CV del C 63 S actual, por lo que este C 53 debería andar en algún lugar entre estas cifras y los 421 CV del A 45. Además esta parte eléctrica contará con una batería de mayor capacidad que la de modelos como el CLS 53 y al mismo tiempo no se verá comprometido el peso final del modelo gracias al ahorro de kilos que supone cambiar un V6 3.0 por un cuatro cilindros 2.0 que seguramente llegue a ambas versiones acompañado de una transmisión automática de 9 velocidades.
Queda esperar a que Mercedes vaya desvelando más detalles sobre esta nueva revolución de su famosa berlina que comenzará a llegar este 2020 en una quinta generación a la que le seguirán estas versiones AMG que sin duda darán que hablar. Todo apunta a que este C 53 llegará en 2021, un poco después de la nueva generación del Clase C, mientras que su hermano mayor, el C 63, podría aterrizar entre seis meses y un año después.
Especializado en el mundo del motor, la competición y la tecnología, Antonio Ramos Ochoa es redactor de Car and Driver. Se comenta que antes de bajarse del carro ya iba diciendo el nombre de los coches que iba viendo por la calle. Unos cuantos años después sigue hablando de una de sus pasiones aquí. Aficionado al Motorsport, el cine, videojuegos y la historia, incluso se desfoga de vez en cuando al volante de un kart o un simulador.
