El Gobierno alemán se muestra tajante con el tema de la contaminación: quiere retirar de la circulación todos los vehículos diésel anteriores al año 2009 para así recudir la contaminación, sobre todo la que se produce en las grandes ciudades. Para ello ha propuesto unas importantes ayudas a la compra, tal y como publica Diario de Sevilla.

Junto con estas ayudas directas a la compra el Gobierno alemán estudia con los fabricantes la posibilidad de modificar el hardware de los vehículos para disminuir las emisiones, si bien en este sentido no hay consenso con las marcas de automóviles por el elevado coste que supondría y que no estarían dispuestas a asumir de forma directa.

El tema de la ayuda a la compra si está en marcha y de hecho a día de hoy varias han confirmado que están dispuestas a proporcionar una subvención directa a la compra de hasta 10.000 euros a todos aquellos clientes que decidan cambiar su diésel antiguo –Euro 4 (2005) o Euro 5 (2009)– por uno nuevo.

Entre las marcas que han confirmado estas ayudas están Mercedes, BMW, Renault y Volkswagen, si bien no todas ofrecen la misma cantidad.

Al contrario que en otros países europeos como España, en Alemania son contrarios a restringir la circulación en las ciudades.

Así, en el caso de Mercedes –Daimler– ofrece 10.000 euros a los compradores que adquieran un nuevo coche de su marca que cumpla la norma Euro 6 d TEMP –que entrará en vigor en 2019– o Euro 6c –que se aplica desde septiembre–.

BMW por su pare subvenciona esta compra con 6.000 euros, mientras que Renault también hará como Mercedes y aportará 10.000 euros. En el caso de Volkswagen la ayuda es de 5.000 euros a lo que añaden unas condiciones de financiación preferenciales.

Al contrario que en otros países europeos como España, en Alemania son contrarios a restringir la circulación en las ciudades. Para ello se ha preferido proporcionar ayudas directas a la compra o bien estudiar la posibilidad junto con las marcas de automóviles de realizar una actualización del hardware de los vehículos para disminuir las emisiones, si bien en este sentido las marcas se muestran reacias dado el coste que supone.

Según datos de la autoridad de transportes alemana KBA Alemania cuenta con un parque de vehículos de 46,5 millones de vehículos y cerca de 9 no tienen la Euro 6, a lo que se añade que 3,1 cumplen solo la Euro 4 y 5,7 la Euro 5.