La prohibición o limitación de dirigir directamente los escapes del monoplaza para alimentar los difusores traseros ha suscitado una respuesta contraria a la inicial: un derroche de ingenio, imaginación, estudios, pruebas e inventos para buscar alternativas legales que imiten el efecto creado por los antiguos difusores soplados de Red Bull.

Los equipos ya no buscan principalmente en el motor y sus componentes las décimas de segundo para adelantar a los rivales, sino en la fuerza del viento. Algunas de esas alternativas han suscitado continuas quejas, y todo parece que el asunto sólo acaba de empezar.

Sauber ha ideado un complejo sistema bautizado como 'efecto Coanda', en referencia al pionero aeronáutico rumano Henri Coanda que lo descubrió en 1910. Según Livio Oricchio, periodista de O Estado de S.Paulo, el invento montado en el C31 permite llevar el flujo de aire de los escapes directamente al difusor trasero, gracias a la tendencia de un fluido en movimiento a adherirse y seguir el contorno de una superficie adyacente. En otras palabras, los gases en movimiento siguen la forma de la carrocería o de una protuberancia al 'resbalar' sobre ella, cambiando su dirección y llegando así a los deseados difusores, algo perfectamente permitido por el reglamento.

La Fórmula 1 lo aplica desde hace años evitando así la instalación de demasiados deflectores, pero Sauber parece la pionera en hacerlo sobre los gases de escape. Según las informaciones del periodista brasileño, Ferrari será la siguiente escudería en seguir los pasos de Sauber.

Pero es el S-Duct de Mercedes el invento que más reacciones negativas despierta en el paddock. Su sistema completado por el alerón trasero móvil sigue dando dolores de cabeza en Ferrari, RBR y Lotus, especialmente, los tres equipos dispuestos a continuar las quejas en el Gran Premio de China, pese a que Charlie Withing ha ratificado que tanto el sistema de Sauber como el del W03 de Mercedes son legales. Helmut Marko, sin embargo, advierte que hay cabos sin atar: "Los de Lotus, que son muy responsables, han descubierto dos puntos donde el conducto de Mercedes no está dentro de la regulación".

Realmente parece que la dificultad para copiar estos inventos es la que está motivando las quejas entre estos tres equipos, que no pueden adaptar los ingenios rápidamente a sus monoplazas, y prefieren directamente su prohibición. El hecho de que aparentemente el conducto de aire de Mercedes, o S-Duct, envíe el aire desde la parte posterior a la delantera es un cambio profundo en el concepto aerodinámico explotado hasta hoy en la Fórmula 1.

Según Oricchio, hasta Adrian Newey está teniendo problemas para buscar una solución aerodinámica propia: "Sobre el conducto aerodinámico de Mercedes, que envía el flujo de aire desde atrás a delante, es necesario revisar el proyecto entero", asegura consternado. En cualquier caso, está claro que estamos viviendo unos momentos revolucionarios en la aerodinámica de este deporte que marcarán el futuro de la Fórmula 1.