La idea de hacer una Fórmula 1 con motores de dos niveles distintos ha dividido a los que se encuentran dentro del deporte. Bernie Ecclestone y Jean Todt están trabajando conjuntamente en el plan, que fue propuesto cuando Ferrari vetó reducir el precio de las unidades de potencia para los equipos cliente.

Así que ahora el nuevo plan es plantear una serie de regulaciones paralelas, con un suministrador independiente como podría ser Ilmor o Cosworth, que competirían con las unidades de potencia ya existentes pero a precios más razonables, como el V6 biturbo de la Indycar.

Ell jefe de Ilmor, Mario Illien, sin embargo, ha advertido de que para asegurar motores que puedan competir con los actuales del Campeonato, los nuevos tendrán que ser más potentes ya que no tendrán todo el sistema de recuperación de energía. Y aquí aparece un nuevo problema, asegurar la paridad de los dos motores.

El ex piloto de F1, Stefan Johansson, sin embargo, se muestra más entusiasmado, afirmando en su propia página web, esta semana ,que debido a la situación política del deporte, es una buena opción. "Si ellos pudieran encontrar una fórmula que nos diera una igualdad razonable creo que sería la manera de proceder, tiene que ser más barato para los equipos más pequeños poder competir", asegura defendiendo a los equipos más modestos.

Helmut Marko, consejero de Red Bull, siente aprecio por la idea aunque todo esto signifique diferentes niveles de consumo de combustible. "Las carreras serían interesantes por las diferentes condiciones de los motores en momentos diversos de las carreras", comparte con la publicación alemana Auto Motor und Sport.

Pero Marc Surer, otro ex piloto, que trabaja como comentarista alemán, piensa que toda esta situación es sólo una estratagema. "Básicamente todo esto es por la lucha de poder", comenta para la publicación alemana Speed Week.

"Creo que la FIA y Bernie tienen claro que los motoristas tienen demasiado poder. Puedo imaginar que la introducción de motores alternativos sólo significa presión para conseguir lo que todos quieren, una Fórmula 1 con un sólo tipo de motor pero con normas menos restrictivas", finaliza Surer.