Con 164 Grandes Premios disputados, un Campeonato de Pilotos en 1997, una victoria en la Indy 500 y el campeonato CART en la mano, Jaques se une al equipo de Sport Garage, con los que ya competió en la Trophée Andros [famosa competición de carreras sobre hielo, n.d.r], para disputar el Campeonato GT de Francia a los mandos de un Ferrari 458 Italia. Fomará dupla con Eric Cayrolle, tres veces campeón de la Super Touring, y será el segundo expiloto de Fórmula 1 en la parrilla de la serie GT francesa, ya que se une al que fuese piloto de Toyota, Olivier Panis.

Al igual que otros expilotos de la máxima competición automovilística como lo son el japonés Kamui Kobayashi, que correrá el WEC con Ferrari, o el indio Karun Chandhok, Villeneuve busca nuevas motivaciones en el mundo del motor.

"Corrí sobre hielo este invierno con Sport Garage y Petit Christian, el jefe del equipo, me habló de esta posibilidad. Me gusta trabajar con este equipo, el Ferrari 458 es un buen coche, Eric Cayrolle es un buen compañero de equipo y el patrocinador, Samsung, es a la vez internacional y de prestigio. Todo está ahí para que sea un proyecto profesional. También tengo la oportunidad de trabajar con un ingeniero con el que he trabajado durante los últimos tres años sobre el hielo. Eso es importante para mí, porque he ganado mucho tiempo para prepararme antes de la primera carrera", dijo el canadiense.

En cuanto a la experiencia en carreras GT, Jaques comentó. "Hice una carrera el año pasado en Bakú. Las reglas son relativamente parecidas, por lo que estoy familiarizado con los cambios de piloto durante las carreras de resistencia. Sé que lo más importante es tener un buen equilibrio entre los dos pilotos. Creo que es muy importante para mí poder contar con mi compañero de equipo, y creo que así está bien con Eric Cayrolle. Cuando es una carrera por diversión, eso es diferente, pero aquí hay que apoyarse unos a otros".

Villeneuve afronta esta competición como un reto personal y busca algo más que diversión en esta nueva etapa: "¡Conducir es divertido! Pero quiero tener un enfoque profesional para poder trabajar bien. Hoy es difícil fijar un objetivo preciso. No sé cómo es el coche ni las carreras de GT, que son una disciplina nueva para mí. Dicho esto, tengo confianza. Estoy en esto para ganar y conseguir podios. Me gustan las cosas nuevas y estoy muy emocionado de descubrir esta nueva serie”.

Será la primera vez que el canadiense compita defendiendo los colores de Ferrari. Durante años buscó recalar en la escudería italiana de Fórmula 1 sin éxito, algo que sí logró su padre, y el momento ha llegado, aunque no sea en el Gran Circo.

"¡Lo más importante es que el coche sea rápido! Y luego, siempre es bueno estar al lado de un constructor como Ferrari, sabiendo que el único Ferrari que he conducido fue el viejo Fórmula 1 de mi padre en Fiorano".