La temporada 2015 constituyó el punto de consolidación necesario para la escudería Williams, que vieron que lo que consiguieron en la anterior campaña no fue fruto de la casualidad. Tras unos tiempos complicados en las últimas temporadas de la era V8, protagonizaron un ascenso meteórico desde el fondo de la parrilla a las posiciones de cabeza y llegaron incluso a pelear por ganar carreras.

Tras ello, el equipo prepara la temporada 2016 con el objetivo de dar un nuevo paso adelante y poder luchar con Ferrari y Mercedes por los puestos de honor en los diferentes escenarios que conformarán el nuevo año. En línea con ello, el equipo indicó a través de sus redes sociales, el pasado 2 de febrero, que ya completaron el primer fire-up test del monoplaza, una prueba local destinada a poner en funcionamiento todos los sistemas del monoplaza, comprobar que en estático todos los componentes trabajan bien, y que no hay defectos de construcción, un paso necesario para poder confirmar el nacimiento del nuevo coche. El próximo paso para la formación será colocar el monoplaza en el trazado catalán de Montmeló, el próximo 22 de febrero.

"El Williams FW38 se encendió por primera vez ayer. Sin problemas, fue genial escuchar el rugido de nuevo, ¡ahora menos de tres semanas para los test!", se podía leer en su cuenta de Twitter el día 2 de este mes.

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ACTUALIZACIÓN 16/02/2016:

Además, este martes, han compartido con sus seguidores el sonido de la unidad de potencia alemana que les acompañará este 2016. "Escucha al Williams FWW38 por primera vez mientras encendemos el coche antes del primer test de pretemporada".