Michelin continúa con su discurso de necesidad de cambio en la F1 en materia de neumáticos. Tras los reventones de Spa y los problemas con las presiones en Monza, la marca gala ha plantado cara a Pirelli para asegurarse el contrato como suministrador a partir de 2017.

En medio de toda la controversia relativa a los neumáticos, Bernie Ecclestone –quien decidirá quién es el futuro suministrador- ha mostrado su apoyo a Pirelli en un comunicado.

Es este, emitido por la FOM, se explica que Pirelli fue alentado para producir neumáticos con un rendimiento limitado, ya que la degradación de los neumáticos contribuye al espectáculo en una carrera de Fórmula 1.

Por otro lado, Michelin nunca ha escondido que su actitud es que un neumático de F1 no debería ser diseñado para que se degradase, sino que los pilotos puedan darlo todo para demostrar su talento sobre la pista.

"Hemos sido muy claros desde hace un tiempo. No estamos diciendo que Pirelli esté haciendo las cosas mal, lo que decimos es que la filosofía de Michelin es diferente. Dos cosas. Primero, creemos que un suministrador de neumáticos necesita mostrar un aspecto positivo, pero creemos que un neumático que se degrada en pocas vueltas no nos permite desarrollar un buen producto. El segundo aspecto es que hoy en día los neumáticos de F1 son de 13 pulgadas, algo que no representa a los que se usan en coches normales, ni siquiera en coches de alto rendimiento,” ha dicho Pascal Couasnon, director de competición de Michelin.

Sin embargo, desde los reventones de Spa, algunos han indicado que la marca francesa también tuvo problemas de seguridad con sus gomas en el pasado. Muchos recordarán el GP de EEUU de 2005. Por aquel entonces, había dos suministradores de neumáticos –entre los que estaba Michelin- y sólo los monoplazas que montaban Bridgestone compitieron en la carrera del domingo por motivos de seguridad.

"Eso fue hace 10 años. Hemos aprendido mucho. Creo que lo demostramos cada fin de semana en diferentes competiciones, ya sea LMP1 en el Campeonato del Mundo de Resistencia con Audi y Porsche, o también en el FIA GT con Ferrari o Corvette. Todas estas marcas creen en Michelin. Tuvieron la oportunidad y eligieron Michelin. Estoy seguro de que la FIA y la F1 saben que somos una marca muy fuerte", ha asegurado Couasnon.

Por último, habla sobre los problemas que tuvo Pirelli durante el GP de Bélgica pero no saca una conclusión al respecto.

"No sé cómo se fabricaron esos neumáticos ni estábamos allí. Sabemos que Spa es una pista difícil, pero no tengo nada que decir al respecto,” ha finalizado.