Fue en los test post GP de Austria cuando los equipos pudieron probar los nuevos neumáticos que prepara ya Pirelli para el año 2016.

La guerra con la marca italiana está garantizada ya que a cada carrera que pasa, a Pirelli se le sugieren coas distintas. En el año 2013 recibieron críticas por unos neumáticos muy inestables que llegaron a explotar en el gran premio de Gran Bretaña. Ahora el deporte se queja de neumáticos muy conservadores que propician carreras aburridas.

Ferrari, Mercedes y Toro Rosso calzaron las nuevas ruedas de 2016 y concluyeron que "tienen características similares a los actuales pero con materiales ligeramente distintos".

Paul Hembery dijo que el número de peticiones para hacer neumáticos más agresivos estaba incrementando.

Cuando a Hembery se le preguntó si los últimos test fueron un paso atrás, el británico dejó claro que para hacer frente a las peticiones de los equipos para cambiar esos neumáticos, es necesario que les permitan tener más test.

"Desde nuestro punto de vista recibimos peticiones todo el tiempo, incluso ahora, de que podríamos ser más agresivos el próximo año. Los equipos quieren neumáticos más agresivos, con más grip y yo creo que es una petición un poco tardía. Esto significa que necesitaremos más test porque al final hay que encontrar un equilibro igualmente", ha dicho a Sky Sports.

Mientras la marca italiana busca esto, Michelin admite estar decepcionar con la situación actual del deporte, ya que su punto de vista es "queremos ofrecer la oportunidad a equipos y pilotos de tener neumáticos que permitan a todo el mundo a tirar hasta el final", decían.

Hembery de todas formas no ha observado demasiado apoyo a esta propuesta pero tampoco se arriesga demasiado y habla por sí mismo.

"Solo puedo hablar por nosotros y en cada reunión, noto algo distinto", ha comentado. "Todos los equipos nos han preguntado por un plan más agresivo además de que sienten que las carreras han perdido ese elemento de estrategia en cuanto a los neumáticos, carreras menos interesantes. Además decían que el producto que se lo ofrecía al público antes era mejor. Esto es lo que estamos discutiendo con la FIA y los equipos", ha concluido.