Nico Rosberg cuenta ya con una dilatada experiencia dentro del Mundial de Fórmula 1. Desde su llegada al Mundial en aquel Gran Premio de Bahréin, donde remontó hasta la séptima posición y firmó nada menos que la vuelta rápida, han pasado más de nueve años en los que el subcampeón del mundo de 2014 ha ido perfeccionando su estilo de pilotaje.
Pero, todavía a estas alturas, el alemán considera que cuenta con cierto margen para evolucionar más aún. Rosberg ha apuntado que sus 29 años le invitan a pensar que su tope no lo ha alcanzado por ahora, así que espera que 2015 suponga una temporada para mejorarse a sí mismo.
"Necesito encontrar algo más y empujar duro para conseguir eso. Seguramente, todavía no estoy en mi pico de rendimiento en la Fórmula 1, solo tengo 29 años. Creo que tengo un poco de margen para mejorar y volver incluso más fuerte, y en este momento estoy buscando eso", ha conmentado en Australia.
El hijo de Keke no ha ocultado sus ganas de coronarse Campeón del Mundo esta temporada. Sobre todo después de que en el curso pasado se quedase cerca de alcanzar la gloria.
"Estoy extremadamente motivado para este año, porque vi destellos del éxito el año pasado, y quiero hacer que eso pase este año. Ser Campeón del Mundo de Fórmula 1 es mi sueño y es probable que tenga una oportunidad para conseguir eso este año", ha dicho.
Respecto a qué aptitudes debería perfeccionar, quien obtuvo su primer podio en el Gran Premio de Australia de 2008 ha apuntado que deben ser todas en general. Y es que según opina, un corredor de F1 debe dominar muchas habilidades y ser capaz de controlar muchos aspectos de su vida.
"Simplemente todo. Ser un piloto de Fórmula 1 supone ser muy multifacético, no va solo de girar el volante. Se trata de estar en forma y tener ordenada toda la vida de tu alrededor, así tu atención y energía están para hacer el trabajo perfecto en el coche. Y se trata de trabajar con el equipo y entender la tecnología del coche, este año hay muchas cosas nuevas", ha finalizado.
