Por primera vez en la historia los aficionados suizos tuvieron la oportunidad de ver rodar, por las calles de Ginebra, un coche de Fórmula E. El evento fue organizado por TAG Heuer, sponsor de esta competición, y sirvió como levantamiento de la prohibición de carreras deportes en este país. El monoplaza que contemplaron lo pilotó Simona de Silvestro.

La última carrera del motor que se celebró en Suiza fue en el circuito de Bremgarten, cerca de Berna, en 1954. Ahora, después de una decisión histórica tomada por el Consejo Nacional, esta nación puede volver a recibir al automovilismo profesional. La nueva ley, pendiente de confirmación por el Consejo de los Estados, se limita sólo a las carreras de vehículos eléctricos. Esto abre la posibilidad para que la Fórmula E tenga su ePrix en Suiza.

"Fue un momento muy especial para mí el haber conducido un coche de Fórmula E aquí en las calles de Ginebra en el día que se celebra el regreso de al deporte motor en Suiza. Para mí fue la primera vez que conduje el SRT_01E Spark-Renault, ¡la primera sensación que tuve es que no había ruido! Para un piloto cada nuevo desafío es una gran experiencia y esto fue aún más especial; la aceleración de este coche es muy buena. Estoy segura de que a los fans americanos les encantará ver la Fórmula E en Miami y Long Beach en las próximas semanas", expresó Silvestro, que pilotó para la IndyCar y probó para Sauber F1 Team.

"Nunca hubiéramos soñado con tener un ePrix en Suiza de la tierra de TAG Heuer" añadió Alejandro Agag, CEO de la Fórmula E. "Estamos muy orgullosos de contar con TAG Heuer como socio fundador, y agradecidos que son capaces de ayudarnos en este emocionante desafío. Si la carrera se lleva a cabo, TAG Heuer será nuestro patrocinador. El ePrix fortalecerá nuestra estrecha relación con este país, que es el mercado principal de nuestro socio Global Bank Julius Baer".