Y todo viene causado porque en el power unit de Ferrari, su parte de arriba, que para entendernos la llamaremos tapa, sin caña de cerveza ni ná, es más liviana, ligera, menos robusta que la de sus adversarios franceses y alemanes. Así que en vez de 'poner a dieta' sus cubiertas, estos han pergeñado una solución alternativa: que la de los Ferrari engorde, que la hagan más tocha, pues encima Italia es un país donde se come muy bien, antipasto de entrada, cosas ricas y nutritivas, de las que hacen 'huesos anchos', más orondos.

Anteriormente Fernando Alonso nos había hablado precisamente del propulsor ferrarista, de cómo entrega la potencia, de su rendimiento sobre el asfalto, de su brío en diferentes regímenes, del dominio invernal que cree que, por ejemplo, en el 2010 fue más evidente, 'mazo palmario'. Por último nos dijo lo de: "Si todos hemos tenido que resetear alguna vez nuestro PC, ¡imaginad un Fórmula 1!". Y yo aquí me acordé del chiste del informático, el físico, el mecánico, cuando el coche se les para echando humo y el primero dice: "Por qué no salimos y volvemos a entrar".

De nuevo, y sin causar sorpresa alguna pues era evidente, vemos la llegada de un gran patrocinador brasileño al equipo Williams, tras el caso de Petrobrás que se acomodó el copick a Felipe Massa. Esta semana tuvimos el anuncio de la llegada de otro esponsor de esas tierras de "muita samba". En esta ocasión se trata del Banco do Brasil, cuyo nombre deja a las claras su procedencia. Y retomando quien/es son "pay for pilot", me acordé de un compatriota de Massa llamado Bruno Senna, su esponsor Banco Cruzeiro do Sul y el equipo español Hispania Racing F1 Team en el 2010.

Tuvimos las primeras impresiones del responsable jefe de Pirelli, Paul Hembery, acerca del comportamiento de las gomas de la temporada 2014, que veremos girar miles de kilómetros atornilladas a los monoplazas. En resumen diríamos que son más longevas, menos delicadas, aguantan las pasadas de frenada de Hamilton y dejan menos 'marvels'. También dijo que "El superblando es 0,7 segundos por vuelta más rápido que el blando; el blando unos 1,2 segundos por vuelta más rápido que el medio; y el medio es alrededor de 1,3 segundos por vuelta más rápido que el duro". Pues vale, todo perfecto si promete no hacer neumáticos a medida para ningún team o cambiarlos según algunas 'necesidades'.

El Poleman de los primeros test de Bahréin 2014, para más señas un rubiales con aceptable acento castellano llamado Nico Rosberg, dejó claro que es muy pronto para saber donde está cada cual, pero reconoce que su Mercedes es verdaderamente 'AMG', es decir, 'Aguanta Mejor los Giros'. Luego nos soltó esto: "Tenemos que ser a prueba de balas cien por cien cuando lleguemos a Melbourne, en eso es en lo que tenemos que centrarnos". Yo sinceramente creo que lo mejor es que su coche corra como una bala, pero lo de "probarlas". Mejor que no, que seguro duelen cantidad. Vamos, que mucho.

Luego y casi entrando en crónicas más propias del papel couche, se sinceró diciendo que rechaza los helados de su novia, también rubiales ella, llamada Vivian, por cuestiones de peso. Para colmo, la novieta regenta una heladería. Y es que este invierno Nico y Lewis debieron ponerse a dieta e incluso "tuvieron un poco de batalla para ver quien perdía más". De poderle aconsejar algo a ROS, le diría que como siga rechazándole los dulces a su "fiancé", que también tiene batidos en "Vivi's Creamery", creo que lo que perderá aparte de kilos será a su media naranja.

Al hilo otra vez de reseteos o no, supimos que el equipo Marussia ha sufrido 'en sus carnes', quizás mejor en sus software, un ataque informático, un pirateo mediante troyanos, virus y gusanos que hacían que el coche no 'carburase', que se encendieran testigos falsos, que saltasen alarmas inexistentes. Creo sin temor a equivocarme, que es la primera vez que esto sucede en la Fórmula 1 y me pregunto qué tipo de antivirus usan, 'free or pay', sobre todo teniendo en cuenta que las tierras que les abanderan, Rusia, es semillero de miles de hacker muy curtidos y virulentos, que pueden trabajar en condiciones extremas, sobre todo de frío.

Algo pensado por muchos, y que viene de lejos, casi crónico en la Fórmula 1 desde, diría yo, lustros; hay algo que es inexplicable que se consienta en un deporte tan técnico, que mueve tantos miles de millones de dólares o euros. Y pensaréis algunos ¿pero a qué se refiere el tío Sam? Yo, vamos. Pues mira tú por dónde que viene de los EE.UU, donde está el otro tío Sam, 'Uncle Sam' y más concretamente desde el sur, donde reina la estrella solitaria. Y es que Eddie Gossage, director del Texas Motor Speed, haga declaraciones del tipo: "Bernie Ecclestone hace cosas absurdas".

Más tarde y muy al estilo de allí, como sucedía en el lejano Oeste, en plan llanote y para quedarse 'ancho y a gusto', le tildó directamente de "tonto", pues no es la primera vez que como decía Forrest Gump en su peli, "hace y dice tonterías". Y todo viene a raíz de hacer coincidir el GP de Fórmula 1 de Austin, fijado en USA para el 2 de noviembre del 2014, con ni más ni menos que con el "Texas Motor Speedway" a celebrar en el circuito al que da nombre la localidad, también tejana, de Fort Worth y a unos 300 km de Austin. Este óvalo comenzó a dar espectáculo en el año 1997 y pasó de una a dos carreras año desde 2005; tiene un aforo de 154.861 espectadores. Desde luego la decisión de Bernie es, de traca, de iluminado, de pocas luces.

Para terminar todo este entuerto y no miro a nadie, que siempre que le sacan una foto parece serlo, constantemente 'pasando treinta y una', es decir, Bernie respondió así, "debemos ser eficientes". Y se refiere claro está, al trasiego de llevar y traer el circo por medio mundo, de aquí para allá y vuelta a empezar, subidos a lomos, mejor bodegas, de seis aviones Jumbo. Según Ecclestone estos gigantes tienen unos hábitos, unas rutinas, planes de vuelo los llaman, preestablecidos, fijos, casi como la gran migración que se produce anualmente en la zona del Serengueti-Masai Mara.

Alguien que sabe muy bien de "qué va el percal, cómo se carda la lana", alguien experimentado y curtido en armarse de estoicismo, de aguante, temple y calma, hombre sereno sin duda alguna durante años, ese es Mark Webber. Así que una semana más nos ofreció la siguiente sabia declaración, no sobre él, si no sobre un compatriota suyo, "Requerirá paciencia hasta cierto punto, se trata de un nuevo escenario, pero una vez que encuentre su camino, el cielo es el límite para él", refiriéndose claro está a Daniel Ricciardo. Luego supimos algo más, "Yo creo que ganará Grandes Premios este año, lo que será un gran impulso de confianza como piloto". En lo primero desde luego que puedo estar de acuerdo, pero lo segundo lo veo tan difícil como poder ver sonreír por ello a Mateschitz y Marko por ejemplo.

Y hablando de Marko, de nombre Helmut, hombre que podía haber dedicado su vida al humor, al "chisterio, al jaraneo monologuista", incluso a presentarse anualmente al concurso de chirigotas del Carnaval de Cádiz con éxito garantizado. En esta ocasión, fue la Fórmula 1 quien ganó frente a este monstruo del chascarrillo, así que nos ofreció precisamente un par de "grasias" para enfrentar mejor el fin de semana: la primera sobre que Vettel "no se divierte con su nuevo RB10, debido al gran retraso del monoplaza". Y la segunda: "enfadarse no nos aporta nada". Yo ante declaraciones así, es que no puedo, no puedo dejar de reír…