Ahora mismo las negociaciones entre la organización y Bernie Ecclestone están paradas. El jefe ejecutivo de la Fórmula 1 presionó para que se convierta en una carrera nocturna, mientras que el Gobierno australiano quiere renegociar las condiciones del contrato para llegar a un nuevo acuerdo.

"Me encantaría que el contrato se extendiera más allá de 2015 [el actual expira ese año n.d.r.], pero no con este nivel de subsudio”, ha apuntado la ministra de Turismo, Louise Asher, al diario The Age. "El Gobierno firmó un contrato que es muy caro para el contribuyente, en mi opinión. Es una carrera muy cara y no estoy contenta con la cantidad de dinero que tenemos que poner de nuestra parte”.

Por su parte, Peter Logan, portavoz de la plataforma 'Salvemos Albert Park', aseguró al periódico que el Gran Premio no se podrá seguir celebrando si no se modifican los términos económicos. "Es un modelo de empresa fallido. Cualquier otro evento en Melbourne está organizado por gente que sabe lo que hace con poca subvención del gobierno”.