"Los malos resultados tuvieron influencia en la parte psicológica", admitió Felipe Massa a la publicación Revista ESPN. "Di con un psicólogo y me sometí a terapia. Haré todo lo necesario hasta el final, porque creo que las cosas cambiarán", explicó Massa, que no ha ganado ninguna carrera desde que luchara por el título en 2008.

El paulista ha negado en repetidas ocasiones que su brutal accidente tuviera un posterior efecto en su rendimiento al volante del Ferrari. Sin embargo, ahora admite: "No soy estúpido. Estoy cansado de pensar en ello". Y añadió: "No sólo pensé en ello, me hicieron 45.000 pruebas. Todos los médicos dicen que no hay nada [que afecte al rendimiento]".

Massa, no obstante, se quejó de que el "99%" de la prensa brasileña le ha dado la espalda. Unas críticas que se unen a las recientes declaraciones en las que pedía más respeto a los medios de comunicación y mantenía que de haber ganado el campeonato en 2008, su vida en el paddock habría sido "más fácil".