Desde la llegada de Red Bull a la Fórmula 1 en 2005, la escudería austríaca ha cambiado la idea de la competición y la mentalidad de su desarrollo. Cinco años después de su debut en la categoría reina, el equipo de Milton Keynes ganó el campeonato de pilotos y de constructores. En una entrevista a la página web oficial de la F1, el asesor de la formación, Helmut Marko, ha señalado que la continuidad de Red Bull en la máxima competición dependerá de los éxitos en pista, comerciales y de marketing de la marca en la categoría.

"La Fórmula 1 es una herramienta de marketing para Red Bull, lo que significa que evaluamos el desarrollo de nuestro compromiso. Esta ecuación tiene que ser positiva. Si el éxito a largo plazo está presente, entonces no habrá dudas sobre la continuidad. Y si se observa la realidad de la situación, tenemos contratos a largo plazo con nuestro proveedor de motores, con nuestros patrocinadores y con nuestro personal", aseguraba el asesor de la escudería austríaca.

Los éxitos de Red Bull estas útlimas temporadas están haciendo que míticas escuderías de la Fórmula 1 como McLaren y Ferrari hayan quedado por detrás del equipo 'recién llegado'. En opinión de Marko, ser la formación de la parrilla a batir les hace estar orgullosos de su actual posición. "Es verdad que no somos constructores, y nunca intentaremos serlo, pero queríamos tener éxito en el deporte. Que seamos líderes como lo son McLaren y Ferrari nos hace estar orgullosos", afirmaba Marko.

"Siempre nos estamos centrando en quién es el mejor, a quién se le tiene que superar. Entonces salimos a pista y lo mostramos. Esa siempre ha sido la filosofía de Red Bull. No puedo entender por qué los demás tienen complicaciones con esta perspectiva. Lo verdaderamente divertido es que en las últimas décadas McLaren y Ferrari han sido archienemigos, pero desde nuestra llegada y nuestro éxito se han unido mucho más", añadía el austríaco a la web oficial de la Fórmula 1.

Muchos se preguntan cuál es la fórmula del éxito de Red Bull, una escudería que cinco años después de llegar al Gran Circo ganó su primer mundial de constructores. Para Marko, la clave se centra en la continuidad, constancia y regularidad. "Diría que la palabra mágica probablemente es continuidad en las decisiones de márketing del más alto nivel. No hemos visto ningún cambio en los últimos tres años. Y cuando han habido cambios se han hecho dentro del equipo. Se ha movido gente de un departamento a otro cuando mostraban el talento correspondiente, pero todo 'queda en familia'. Saber que un talento será reconocido y se le dará la oportunidad de crecer, crea esta armonía que se convierte en éxito", señalaba el asesor del equipo austríaco.

Helmut Marko también es el director del programa jóvenes pilotos de Red Bull, proyecto que cuenta con cuatro pilotos bien posicionados para ponerse, en el futuro, al volante de uno de los volantes de la formación de Milton Keynes. Aunque se desconoce cuándo llegará este momento, el austríaco ha señalado que ninguno de los cuatro contindentes partirá con ventaja para ser seleccionado. "Tenemos cuatro pilotos a considerar: Jaime Alguersuari, Sebastien Buemi, Daniel Ricciardo y Jean-Eric Vergne. Mark debería decidir parar y entonces uno de estos chicos pasaría a ocupar su sitio. Ahora mismo ninguno de estos cuatros tiene ventaja. Se decidirá cuando se presente la situación", añadía Marko.