Después de una fiesta en el paddock y más festejos con karaoke incluido hasta las 5 de la madrugada, el piloto de Red Bull se fue, tras dormir un rato, directo a Yokohama para asistir a un acto con un patrocinador y un encuentro con los medios de comunicación.

Fue allí donde, según el diario Abendblatt, Sebastian Vettel acertó a decir: "¡Estoy un poco afónico ahora!. Después de una larga noche quiero olvidarme un poco de todo, dormir algo y luego prepararme para Corea".

De hecho, cualquier plan de más de una noche de fiesta tendrá que esperar por el momento, ya que Vettel debe participar en los entrenamientos libres del país asiático en menos de tres días. "Hemos celebrado un título", le cita el portal Rds.ca, "pero no demasiado porque esta semana estamos en Corea".

El alemán negó las afirmaciones del diario Bild según las cuales parecía "casi triste" cuando llegó a darse cuenta de sus logros en el paddock de Suzuka a última hora del domingo. "No estaba triste", insistió. "Puedo estar satisfecho con un segundo o un cuarto puesto, pero está claro que no hicimos una carrera perfecta. Ésa es la razón por la que nos esforzamos".

"También es difícil para mí cambiar de la extrema tensión de una carrera a darte cuenta de repente de que eres campeón del mundo. Ahora es momento de descansar, especialmente de dormir un poco, y luego de tratar de comprenderlo todo. Suena espectacular, lo sé", añadió.

Y el próximo objetivo será repetirlo en 2012. "Queremos seguir así. Es adictivo. Ninguna otra cosa en mi vida me da tanta satisfacción", aseguró Vettel.