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El cuerpo de la reina Isabel II de Inglaterra se trasladó hace unos días del Palacio de Buckingham a Westminster Hall en Londres, donde permanecerá durante cuatro días, para que el pueblo británico pueda rendirle tributo. El ataúd se transporta en un coche fúnebre estatal, el mismo que se utilizará en su funeral el próximo lunes y que ha fue creado ex profeso para este momento con la ayuda de hecho de la propia monarca.
Diseñado por Jaguar Land Rover con el respaldo de la propia reina
Nuestros compañeros de BAZAAR.com descubrieron que el coche fúnebre fue diseñado por la Casa Real y Jaguar Land Rover, y la reina fue consultada sobre los planos y aprobó el modelo final antes de su muerte. El coche fúnebre estatal, un Jaguar XJ altamente modificado, luce un acabado en tono Royal Claret, el mismo color que los vehículos oficiales reales y estatales guardados en Royal Mews en el Palacio de Buckingham y utilizados por miembros de la familia real en funciones oficiales, según cuenta el Palacio de Buckingham.
De esta forma el vehículo ha sido diseñado para permitir que el público tengan una visión clara del ataúd que transporta los restos mortales de la monarca más longeva de la historia mientras viaja de un lugar a otro, acompañado del monograma real de la ya difunta reina.
Desde que el Palacio de Buckingham anunció la muerte de la reina Isabel II el jueves pasado, su ataúd ha viajado desde el Castillo de Balmoral en Escocia, al Palacio de Holyroodhouse y la Catedral de St. Giles en Edimburgo, al Palacio de Buckingham y ahora a Westminster Hall.
La familia real, incluidos el príncipe Harry, la duquesa Meghan, el príncipe William y la princesa Kate, se reunieron para la procesión del ataúd del difunto monarca. El funeral de la reina tendrá lugar el lunes 19 de septiembre. El lugar de descanso final de la reina será la Capilla de San Jorge en el Castillo de Windsor, donde será enterrada junto a su esposo durante más de 70 años, el Príncipe Felipe.
El período real de luto continuará durante una semana más, según el rey Carlos III.