Para los que no tienen suficiente con los 650 caballos del Shelby GT500, el preparador americano especialista en muscle cars y concretamente en el Mustang ha preparado algo más bestia todavía. Su nombre ya nos da algunas pistas de su inverosímil número de caballos, y es que el Shelby 1000, es una de las más potentes creaciones salidas del garaje de Shelby.
Para lograr la abrumadora cifra de potencia -950 caballos en la versión de calle y 1.100 en la de carreras- se ha tenido que reforzar el propulsor 5.4 V8 que equipa su hermano GT500. Por ejemplo, bielas, pistones, culata o escape son nuevos o han recibido mejoras para incrementar el rendimiento a lo que se suma un nuevo compresor volumétrico más capaz.
En el apartado dinámico, la mejora de la frenada era algo obligado y se ha recurrido a un kit completo con pinzas de seis pistones delante y cuatro detrás con discos ventilados, perforados y rayados en ambos ejes.
Cada uno de los Shelby 1000 que salgan de la factoría del preparador irán numerados con su correspondiente insignia de edición limitada. Al precio de 150.000 dólares del Shelby 1000 hay que sumarle otros tantos que cuesta el Shelby GT500 que se utiliza como base, por lo que el precio final rondará los 200.000 dólares -unos 150.000 euros al cambio-.
