Jaime Alguersuari, Adrian Sutil, Marc Gené, Jacques Villeneuve, Dani Sordo, Stephan Peterhansel o Nani Roma, estos son algunos de los protagonistas de esta noche en la esperada carrera del Vicente Calderón, la Stadium Race y mucho se ha hablado de ellos, pero ¿qué hay de sus máquinas?

Pues en primer lugar, para garantizar el espectáculo y la igualdad entre los pilotos, en esta competición se ha apostado por un coche único, el Silver Car CM S2 que la organización no ha dudado en denominar “Stadium Race Car”, pero que en realidad es un viejo conocido de nuestras competiciones domésticas. El Silver Car lleva disputando carreras desde el año 1997 y de esta última versión ya se han vendido más de 50 unidades, acostumbradas a vencer en categorías tan diversas como los campeonatos regionales y nacionales de circuito y, sobre todo, los regionales y nacionales de montaña. Para muestra, sirvan estas imágenes extraídas del campeonato de España de subida en montaña.

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Espeluznante, ¿verdad? Y es que el Silver Car CM S2 reúne una serie de características técnicas que lo hacen ser realmente ágil, rápido, competitivo. En primer lugar, monta un motor Suzuki de 1.000cc. con transmisión por cadena y ubicado en posición central trasera que transfiere su fuerza a las ruedas traseras y desarrolla una potencia de 185 caballos a 13.000 revoluciones por minuto. Además, va asociado a un cambio secuencial de 6 velocidades que permite realizar las transiciones entre marchas con la mayor rapidez posible, al no requerir el accionamiento del embrague. También equipa un diferencial mecánico autoblocante, para mitigar las derrapadas del eje trasero en las aceleraciones en curva.

Acelera de 0 a 100 km/h en 3,5 segundos y puede alcanzar una velocidad superior a los 240 km/h dependiendo de la relación del cambio.

Su otra gran baza es la ligereza. La carrocería de este coche, de 3,74 metros de largo, 1,74 de ancho y 1,04 de alto, está construida íntegramente en fibra de vidrio y su chasis multitubular de acero sólo pesa 70 kilos. En total, el conjunto declara 450 kilos de peso en seco, a los que sólo hay que añadir los del piloto. Eso sí, la carrocería está repleta de componentes aerodinámicos como el alerón móvil trasero, el faldón delantero y el difusor de aire trasero. Todo lo necesario para lograr una carga aerodinámica óptima en las curvas.

Por otro lado, el equipo de frenos cuenta con cuatro discos ventilados y unas pinzas especiales desarrolladas por AP Racing. El freno de mano es hidráulico, la suspensión regulable y los neumáticos, montados sobre llantas de 13 pulgadas, son unos slicks de marca Michelin o Avon. Además, el depósito de la gasolina y el radiador van ubicados sobre el eje delantero para lograr un reparto de pesos excelente.

Después de todo, parece que no va a estar tan mal eso de la ‘Stadium Race’, nosotros no pensamos perdérnoslo, desde luego.

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Jose Carlos Luque

Experto y apasionado del motor y la comunicación en todas sus formas, recalé en Car and Driver a finales de 2007 y desde 2016 dirijo este site. Periodista de vocación y formación, conservo buenos contactos en el sector y trato de que la información que leas aquí sea la más inmediata, completa y veraz. Pero también realizo pruebas, comparativas, noticias, entrevistas... y en mis ratos 'libres' crío a tres niños pequeños que –con diferencia– es el trabajo más duro de todos los que he hecho jamás.