Son los pilotos más inexperimentados de la parrilla, los que menos carreras de Fórmula 1 han disputado, y aun así, comenzarán el Gran Premio de Brasil con sanciones por exceder el límite de piezas que se pueden usar durante toda una temporada. Los nuevos pilotos de Toro Rosso están sufriendo en todo su esplendor las particularidades del actual reglamento de Fórmula 1.

Los dos pilotos de Toro Rosso, como también Daniel Ricciardo, han montado una nueva MGU-H, el elemento de la unidad de potencia que más problemas ha dado en la era híbrida y que están de plena actualidad tras proponerse su eliminación para 2021. Por lo tanto, los tres pilotos comenzarán, de momento, con 10 posiciones de sanción en la parrilla de salida, lo que en el caso de Toro Rosso prácticamente les condena a salir desde el fondo, a la espera de que otro piloto sancione todavía más.

Daniel Ricciardo también ha montado una nueva centralita así como baterías nuevas, pero son las cuartas de la temporada, lo que entra dentro de lo predispuesto y por lo tanto no acarrea sanción.