Nico Hülkenberg protagonizó en México su tercer abandono consecutivo, una mala racha en la que la fiabilidad del motor Renault se lleva todas las culpas.

En el Autódromo Hermanos Rodríguez, no solo el piloto alemán se las tuvo que ver con los fallos técnicos de la unidad de potencia francesa; Daniel Ricciardo y los dos Toro Rosso tuvieron que abandonar por problemas con el motor galo.

"Pude ver problemas con muchos pilotos y nos puso nerviosos", afirma Hülkenberg a Bild. "Vi que Daniel estaba fuera, también los Toro Rosso y pensé 'Dios mío, no dejes que eso me pase a mí'. A un fabricante no debe pasarle algo así. No es aceptable. No somos lo suficientemente buenos".

"A un faricante no debe pasarle algo así"

El enfado del piloto alemán es evidente y añade que la fiabilidad debe ser el principal objetivo de cara a la próxima temporada, pues de lo contrario no podrían pelear por objetivos importantes.

"Todos están enfadados, frustrados, decepcionados. Debemos tenerlo bajo control el próximo año. El daño está hecho este año, pero la fiabilidad es nuestra principal tarea para 2018. De lo contrario, incluso tener el coche más rápido no nos ayudaría", concluye.