Los directores técnicos tienen en su mano decidir cómo será la normativa definitiva de la Fórmula 1 en 2017 en su encuentro de la próxima semana. Así lo cree Nick Chester, director técnico de Renault, pese al desacuerdo de los equipos en la última reunión que tuvieron para tratar el tema.
Todos son conscientes de que se necesitan cambios en la normativa pero, con intereses individuales en conflicto, hay equipos que buscan modificaciones aerodinámicas más grandes y otros que, por el contrario, quieren cambios pero siguiendo una línea cointinuista a lo visto en los últimos cursos.
Así, los directores técnicos han vuelto a quedar para reunirse este 11 de febrero de cara a intentar alcanzar una solución antes de que llegue el 1 de marzo, fecha límite que se ha marcado para presentar la nueva normativa.
"Se ha desviado mucho. Una de las dificultades que hay, es que cuando se cerca a una fecha de decisión final - 1 de Marzo - todos los equipos se posicionan un poco más de lo que podríamos haber estado hace seis meses”, ha dicho Chester a Motorsport.com. "Tenemos una nueva reunión el día 11 y espero que se den progresos decentes".
El británico cree firmemente que las diferencias entre los equipos pueden solucionarse y encontrar un punto de equilibrio, aunque para ello el Grupo de Estrategia y la FIA han de estar comprometidos.
"Puede haber soluciones pero solo si hay dirección suficiente por parte del Grupo de Estrategia y de la FIA sobre lo que quieren", ha apuntado. "Con directrices suficientes, podemos acordar una normativa. Tuvimos acordadas las normas antes de Navidades desde el punto de vista del estilo así que podríamos ir a por ello y clavar la normativa, pero necesita que se le dé dirección. Si para la reunión podemos tener más peticiones sobre lo que se quiere, podremos cerrarlo", ha concluido.
