Romain Grosjean tuvo una sensacional actuación en la pista de Spa-Francorchamps, una situación que propició que desde la jornada de calificación pudiera colocar su monoplaza en los lugares de cabeza, y se redondeo con su acceso a la zona de podio, tras aprovechar los problemas que tuvo Ferrari en las últimas vueltas de la carrera. Un buen fin de semana, que, no obstante, contrasta con los problemas internos que tuvieron en el equipo tras la denuncia de Charles Pic por incumplimiento de contrato en 2014 y que tiene paralizado todo su material aún en el circuito belga.
Todas estas problemáticas se ven envueltas en una negociación de Lotus con el equipo Renault, en un marco de compra-venta del equipo, que supondría el regreso del campeón a la pista. Cuestionado sobre esta situación, el piloto galo ha señalado no temer por el futuro del equipo.
"Los dirigentes no actuarán en detrimento del equipo. La situación es difícil y no tengo que ocultarlo, diciendo que el equipo puede ser vendido", ha dicho a Canal + Francia.
También indicaba que a pesar de los problemas, en su equipo continúan trabajando de manera normal, y que espera que Renault pueda comprar el equipo, lo que podría permitir que el equipo recuperara su exitoso pasado.
"Estamos hablando con un grupo de personas extraordinarias vienen a en una situación nada fácil. Sabemos que si Renault comprara el equipo, y esperemos que esto suceda, se convertirá en una bonita historia y en una interesante aventura. Si toda la gente de Enstone se queda creo que seremos capaces de volver arriba bastante rápido", ha concluido.
