Sauber ha sido una de las sensaciones tas el Gran Premio de Australia. Después de pasar momentos críticos durante el fin de semana por las acciones legales emprendidas por Giedo van der Garde, la formación suiza vio como sus dos coches entraron en los puntos.
Particularmente destacable fue la actuación de Felipe Nasr, que cruzó la meta en quinto lugar. El piloto brasileño ha apuntado de dicho logro que supone un importante impulso para toda la formación y espera que sirva para seguir evolucionando. Desde su punto de vista, el coche cuenta con un buen potencial y, si se invirtiese en él lo suficiente, este progresaría adecuadamente y desplegaría todas sus cualidades.
"Es un impulso para todo el mundo en el equipo. Creo que es motivación para todo el mundo, todos los mecánicos. Simplemente muestra que el equipo hizo un buen progreso durante el año pasado, y todavía pienso que hay margen para más. Si fuéramos capaces de invertir más en el coche, creo que todavía hay más potencial por llegar".
Del resultado como tal, el subcampeón de la GP2 ha reconocido que no lo esperaba. No obstante, a lo largo de la carrera todo fue sobre ruedas y no se sufrieron de los problemas comunes que suelen aparecer en la primera cita de toda temporada.
"No esperaba eso para ser honesto. Pero al final es un gran alivio para todos, para mí mismo, para el equipo. Simplemente estoy muy contento de que todo llegase junto en esta carrera, porque sabemos cómo pueden ser las cosas, especialmente en una primera carrera, puede ser bastante caótica".
Nasr ha explicado que la carrera fue todo un ejercicio para él, ya que tuvo que exigirse mucho para controlar multitud de aspectos. Dicha exigencia también fue muy alta para el equipo, tal y como ha recordado el corredor, quien ha destacado que todos sus mecánicos rindieron aun gran nivel.
"Es increíble, tengo que decir. Creo que nadie estaba esperando eso. Fue un ejercicio para mí, también mentalmente, mantener todo bajo control, y ser capaz de centrarme cuando estuve en el coche. Eso también muestra que el equipo estaba preparado, creo que nunca se rindieron. Solo muestra la motivación de los chicos, conocían el potencial, y fueron capaces de rendir".
Así pues, para concluir, el debutante de 22 años ha vuelto a resaltar su alegría por lo conseguido y por el hecho de que muchos aspectos importantes de la competición como las paradas en boxes o la fiabilidad no dieron problema alguno.
"Estoy simplemente muy contento de que fuera una carrera limpia, no tuvimos problemas en el coche, la parada fue bien, la estrategia bien también. Es difícil conseguir días como este, siendo realista. Como dije, estábamos preparados para ello, y nos llevamos la oportunidad a casa", finalizó.
