El vigente campeón del mundo de Fórmula 1, Sebastian Vettel, está a punto de perder su corona y entregársela a uno de los dos pilotos de Mercedes, ya sea Lewis Hamilton o Nico Rosberg. La frustración del alemán por su situación actual ya se hizo notar en el pasado Gran Premio de Japón, cuando, para sorpresa de todos, vimos como su paciencia llegó a su fin y anunció, de forma oficial, su marcha del equipo Red Bull al final de esta temporada.

El tetracampeón no ha logrado adaptarse a los nuevos monoplazas del 2014 y así, critica la nueva normativa de motores, ya que según su propia experiencia puede demostrar, es prácticamente imposible llegar con tan solo cinco motores hasta la última carrera.

El piloto germano, que será castigado por utilizar el sexto motor en Austin, aseguró que no está de acuerdo con esta regla ya que impide a los pilotos luchar durante un GP. "La regla es, por supuesto, completamente estúpida. La gente pondrá la televisión y verá un piloto simplemente sin nada que hacer", resumió el todavía compañero de Daniel Ricciardo.

Vettel confirmó al finalizar la prueba en Sochi que saldría desde el pit lane en Estados Unidos, y que no disputaría la calificación con el objetivo de ahorrarle kilómetros a la unidad de potencia. De hecho, el equipo se planteó esta posibilidad ya en Rusia, pero finalmente no se utilizaron los mecanismos necesarios para hacerlo efectivo. "Quizá podáis sugerirme algo que pueda hacer el sábado por la tarde en Austin", bromeó el aún piloto de Red Bull.