La suerte ha visitado hoy el circuito de Paul Ricard, y se ha cobijado del sol en el box de Arden Motorsport, junto al coche de Pierre Gasly, a la postre el poleman para la segunda carrera de la World Series by Renault en el precioso trazado francés. Sin demérito del piloto, porque Pierre ha mostrado un ritmo fortísimo durante todo el fin de semana, como atestigua su segundo puesto en la carrera de ayer, por detrás del líder del campeonato, Carlos Sainz.

Lo de ayer y también la Pole de hoy prueba de su evidente evolución como piloto en el año que ha cumplido 18. Pero cuando una bandera roja a falta de 27 segundos para el final, permite sólo a un piloto puntero marcar su tiempo y los demás se quedan a media vuelta, con parciales en púrpura pero sin posibilidad de rematarlos en la línea de meta, entonces es que la suerte también juega.

Uno de los pilotos que venía en vuelta rápida era precisamente Carlos Sainz, el flamante ganador de la carrera de ayer y líder del certamen. El madrileño ha sido el segundo más rápido en la primera tanda de vueltas, por detrás de Sergey Sirotkin, y lo tenía todo encarrilado para anotarse otra Pole en la vuelta definitiva. De hecho, cuando ha montado el neumático definitivo había bajado de nuevo sus cronos y ya había superado la recta Mistral cuando Zoel Amberg ha impactado contra las barreras en un accidente un tanto extraño, ya que las escapatorias asfaltadas de Le Castellet están entre las más amplias de Europa.

La consecuente bandera roja ha terminado con las esperanzas de Pole de Carlos, aunque el segundo puesto definitivo le permitirá afrontar la salida con una cierta seguridad, y en un asfalto que no privilegia especialmente el lado del poleman.

Una buena salida podría situarle por delante de Gasly antes de la primera chicane, y con hacerlo normal le debería bastar para mantenerse a la estela de su compañero en el Red Bull Junior Team e iniciar una escapada quizá molesta por ver delante a otro pupilo de Helmut Marko y compañía, pero seguramente muy efectiva con la calculadora en la mano, ya que Sainz encabeza la clasificación general con 31 puntos de ventaja sobre Roberto Merhi y todo lo que sea mantener por detrás al castellonense le serviría para afrontar con relativa calma la última cita del certamen en Jerez. Por lo demostrado desde ayer, su coche está bien reglado y evitar riesgos ha pasado a ser una prioridad para Sainz.

Un poco más atrás, Roberto Merhi afronta la carrera cuesta arriba. Su quinta plaza en la crono de hoy tampoco refleja el mejor registro que podría haber salido de sus manos, pero quizá sí la mejor posición que estaba a su alcance, ya que Sirotkin y su Fortec se han mostrado muy sólidos durante el fin de semana y, aunque Jazeman Jaafar hubiera caído por detrás del castellonense, el Lotus de Vaxivière tenía papeletas de superar a 'Teto' hoy si la bandera roja no hubiera hecho acto de presencia.

No ha sido el mejor fin de semana para Merhi, y especialmente para su equipo, Zeta Corse, que ha estado lejos de la inspiración técnica mostrada en circuitos como Moscú o Hungaroring. La decisión de no montar a nadie en el segundo coche del equipo –Roman Mavlanov corrió y venció ayer la primera carrera del Open GT en Monza– no se ha demostrado la mejor opción en una pista donde el equilibrio entre velocidad punta y paso por curva es difícil de alcanzar en la sala de ingenieros.

Los constantes problemas de Roberto con uno de los elementos imprescindibles para la arrancada tampoco le infunden la mejor sensación para la salida de la carrera, y parece que su sueño de llevarse el título se desvanece poco a poco. Quedarán en cualquier caso sus demostraciones incontestables de talento y la innegable condición de revelación del campeonato, al que llegó inesperadamente tras dos años fuera de la competición de monoplazas.

La segunda carrera en Paul Ricard, prevista a las 13:00 hora peninsular española–se podrá seguir por televisión a través de Eurosport, Canal Sur y Aragón TV–, arrojará luz sobre el desenlace de las World Series by Renault, aunque lo más probable es que no haya certezas matemáticas sobre la identidad de campeón y subcampeón hasta que caiga la bandera a cuadros en Jerez, el próximo 19 de octubre.