No ha habido un solo Gran Premio de Singapur en el que no haya salido a pista al menos un safety car, y este año la estadística se mantiene. Sin embargo, el coche de seguridad no afecta a todos por igual, y esta vez la mala suerte le ha tocado el bicampeón de Ferrari: "La verdad es que habíamos empezado bien la carrera, hasta el coche de seguridad estábamos asegurando la segunda posición y todo pintaba bien. Luego quizás salió en el momento equivocado: teníamos las superblandas, teníamos que parar porque no sabíamos cuántas vueltas iban a durar. Es verdad que con Hamilton la estrategia funcionó, la de quedarse fuera, pero claro, tiene dos segundos de ventaja cuando el safety car se va, y nosotros no los teníamos, por tanto decidimos parar. A veces los safety car te ayudan, otras te perjudican y hoy quizá nos quitaron la segunda posición, pero bueno, como decimos este año, si hay que perder puntos, pues mira, no pasa nada y a intentarlo la próxima vez", ha declarado el piloto a los medios de televisión españoles.

Sin duda, el Marina Bay Street Circuit ha traído sensaciones a la Scuderia muy distintas a las del pasado Gran Premio en Monza. El lastre de potencia del F14T es menor en este circuito revirado de alta carga aerodinámica, condición que ha favorecido un mejor rendimiento del monoplaza de la Scuderia: "Me he encontrado bien durante todo el fin de semana. El otro Ferrari está a 45 segundos, así que veamos qué pasa en Suzuka".

No obstante, Singapur siempre ofrece un reto físico a quienes se enfrentan a sus calles y a su clima. Han sido vueltas largas en un circuito intrincado y cargado de humedad, pero Alonso reconoce que los coches de 2014 han aligerado un poco el sufrimiento: "Sí, aquí suele ser la carrera más dura por la humedad y también porque atendemos a la prensa ahora, nada más bajarnos del coche, pero bueno, respecto a otros años creo que ha sido más fácil, rodamos tres o cuatro segundos más lentos que otros años con los coches de 2014 y la carrera ha sido un pelín más fácil. No sé si las dos horas fue... o cuánto influyó el safety car, si sin el safety car hubiéramos acabado la carrera bien, y tampoco sé cuántas vueltas de menos... Carrera dura sí, pero no tanto como otros años".

El piloto asturiano ha protagonizado, sin duda, una salida fantástica que le ha llevado de la quinta a la segunda posición, pero este éxito se ha visto mermado por un mal cálculo de frenada que le ha complicado un poco más el panorama: "Bueno, la salida regular. Salí bien pero luego cometí un error. Me fui recto, calculé mal la frenada y luego tuve que devolver la posición. Si no me hubiese pasado de frenada y hubiese salido segundo, quizá hubiese sido más fácil pero como digo, cometí un error ahí, tuve que dejar pasar y bueno, gestionar los neumáticos parecía difícil, cuando estábamos con el safety car dudábamos de si podríamos llegar hasta el final".