Si hay alguien satisfecho por el regreso de la Fórmula a 1 Austria más allá de Dietrich Mateschitz -propietario de Red Bull, ése es Niki Lauda. El tres veces campeón del mundo, de nacionalidad austríaca, ha asegurado estar muy contento con la noticia de que el Gran Circo competirá en su país, concretamente en el circuito Red Bull Ring, el próximo año.

Para el actual presidente no ejecutivo del Consejo directivo de Mercedes, la noticia significa una importante e "incalculable" publicidad para Austria. "Esto es lo mejor que nos podría haber pasado a nosotros", señalaba Lauda al diario austríaco Kleine Zeitung. "Esta publicidad a nivel mundial es incalculable para Austria. Siempre he tenido la esperanza de que la F1 regresaría aquí. El hecho de que sea una realidad se debe a Mateschitz. Significa mucho para mí, ya que también he ganado aquí", añadía.

Vencedor del Gran Premio de Austria que se celebró en el Osterreichring en 1984, el tricampeón recibe la noticia con alegría y esperanza de que su país vuelva a estar presente en el calendario de la Fórmula 1 once años después de su última aparición en 2003.

Satisfecho también con el anuncio, el ex piloto de F1, Gerhard Berger, añade que el acuerdo no habría sido posible sin la intervención y ahínco de Red Bull: "Siempre he tenido la esperanza de que aquí habría una carrera de nuevo. Es algo genial y no sería posible sin Red Bull. Tenemos las infraestructuras perfectas con el Red Bull Ring y con un equipo austríaco -Red Bull-. Los aficionados en Austria han estado esperando muchos años para tener algo como ésto", señalaba Berger, austríaco.

Pese a que Mateschitz y Bernie Ecclestone acordaron que la carrera se celebrará el domingo 6 de julio, dicha fecha deberá ser aprobada y ratificada por la Federación Internacional de Automovilismo (FIA) y el Consejo Mundial de Deporte de Motor.