Análisis: las estrategias de los equipos en el GP de Alemania F1

Tras una sesión clasificatoria celebrada en mojado, los equipos podían escoger el compuesto de salida entre el P Zero blanco medio y el amarillo blando, los dos slick escogidos para el GP de Alemania. Los diez primeros clasificados, liderados por Fernando Alonso, ha iniciado la prueba con el neumático blando, mientras cinco coches lo han hecho con los medios: el Sauber de Kamui Kobayashi, el Toro Rosso de Jean-Eric Vergne, el Mercedes de Nico Rosberg (que ha salido en el 21º puesto tras una penalización por cambiar el cambio de marchas), y los dos Marussia, el de Timo Glock y Charles Pic.

La carrera se ha celebrado con una temperatura ambiente de 21ºC. Los equipos han tenido que afrontar la falta de información sobre los neumáticos slick en Hockenheim, tras dos días de lluvia intermitente. Sin embargo, ésto también ha significado que la mayor parte de los pilotos disponían de todos sus juegos de neumáticos blandos sin usar, ya que tan sólo se pudieron utilizar en la última sesión de libres del sábado, así como en Q1 para algunos equipos.

Alonso ha mantenido el liderazgo desde el inicio de la prueba, mientras Jenson Button lograba subir un puesto en su último pit stop en la vuelta 40, con un pitstop una vuelta antes que Alonso y Vettel. Los dos líderes han reaccionado una vuelta después, montando el compuesto medio, pero el tiempo de Button ha sido suficientemente bueno como para alcanzar a Vettel y hacerse con el segundo puesto. Sin embargo, el alemán ha pasado a Button en un movimiento rápido en las etapas finales, posición que ha perdido por haberla conseguido mediante una maniobra ilegal.

El compañero de Button, Lewis Hamilton, ha sido menos afortunado: tras un pinchazo producido por unos restos en pista, Hamilton ha tenido que realizar un temprano pit stop que lo ha alejado del ritmo de cabeza. Pero el británico se ha beneficiado del rendimiento de este juego fresco de neumáticos y ha pasado a los líderes – en una estrategia diferente- justo tras su pit stop, a pesar de circular una vuelta por debajo de éstos: una demostración perfecta de la importancia de montar la cubierta correcta en el momento justo.

Los seis primeros pilotos han desarrollado una estrategia a dos paradas, con Michael Schumacher, que ha realizado un pit stop tardío con los neumáticos blandos, situado como séptimo tras tres paradas – estableciendo el tiempo más rápido por vuelta. Su compañero de equipo, Nico Rosberg, también ha usado una estrategia a tres paradas para recuperar once puestos y acabar como décimo.

El responsable de Pirelli Motorsport, Paul Hembery, comenta: "Los equipos han tenido que ser muy flexibles con sus estrategias, debido a la falta de pruebas con los slick, y como resultado hemos podido ver una amplia variedad de ideas y tácticas. Las estrategias nos han permitido ver una carrera muy equilibrada, con los líderes separados tan sólo por unos pocos segundos durante toda la prueba. A 20 vueltas del final, los tres primeros pilotos se situaban en menos de 3 segundos y se ha mantenido esta diferencia hasta el final. La mayor parte de los equipos han optado por una estrategia a dos pit stop, con los dos últimos stints equipados con el compuesto medio. El último stint ha sido especialmente crucial, con los pilotos cuidando sus neumáticos para asegurar un rendimiento consistente hasta el final. Los tres primeros clasificados han mostrado una gran determinación para maximizar el potencial del compuesto medio hasta la bandera a cuadros".